Trasvase de pacientes en una rotonda o en una gasolinera, servicios de urgencias de Atención Primaria (PAC) que se quedan sin médico porque tiene que salir a un accidente de tráfico, mayores tiempos de respuesta por la recogida del personal sanitario en el centro de salud, ... Estas son algunas de las consecuencias de la falta de una ambulancia medicalizada (con su correspondiente base propia) en O Salnés.

Los trabajadores del sector llevan años reclamando un vehículo de soporte vital avanzado para la comarca, sin que los acuerdos plenarios alcanzados en su día para hacer más fuerza en la Xunta hayan servido de algo.

La semana pasada el PP volvió a rechazar esta reivindicación (de carácter social, no laboral, precisan desde CIG), que llegó a O Hórreo de la mano del BNG. A los trabajadores les hubiera gustado que los concellos se implicasen, sin embargo solo las corporaciones de O Grove y Cambados se reunieron con ellos para abordar la problemática. El resto de alcaldes de la comarca hicieron oídos sordos a las peticiones de los técnicos de transporte sanitario.

Pese al pasotismo de la mayoría de representantes políticos de O Salnés, los técnicos no tiran la toalla y volverán a convocar a los regidores "para que se posicionen", así como volver a elevar el asunto al Parlamento gallego.

Ya sopesan convocar una manifestación ciudadana porque "O Salnés tiene que empezar a moverse" por lo que consideran una reivindicación de carácter social.