El Sindicato Unificado de Policía viene denunciando en los últimos años, las carencias formativas a las que, aseguran, se enfrentan los agentes policiales a la hora de desarrollar su trabajo diario, "así como la ausencia de protocolos de actuación en muchas de nuestras intervenciones".

Afirman que estas "evidentes" carencias, a las que la Dirección General de la Policía "no es capaz de poner remedio", en ciertas ocasiones "ponen en riesgo la integridad física de los miembros el Cuerpo". Aseguran que, "sin ir más lejos, hace pocas semanas, una agente destinada en la Brigada Provincial de Policía Científica de la Comisaría de Pontevedra, sufrió un pinchazo cuando examinaba un cadáver, desconociendo si el cuerpo estaba contaminado o no. En ese momento, nadie sabía cuál era el protocolo a seguir y a donde trasladarla". Para que este hecho no se vuelva a repetir, demandan que "se confeccione y publicite un protocolo al efecto en las distintas dependencias gallegas, habilitando un centro médico de referencia en las principales ciudades de nuestra comunidad".