Un tramo de carretera PO-225 entre Alba y San Caetano, permanece desde la tarde de ayer parcialmente acordonada debido al peligro de desplome de un muro de hormigón. Este riesgo está advertido desde hace varios meses pero hasta el momento no se han adoptado medidas de corrección. En la tarde de ayer fue necesaria la intervención de los Bomberos para instalar unas vallas de aviso, que afectan al carril que conduce hacia Campañó.

El muro se localiza en las inmediaciones del túnel bajo las vías del tren, donde llegaron a empotrarse en su día varios camiones por su bajo gálibo. La carretera, muy estrecha y sinuoso, enlaza la N-550 con la PO-531 y la zona del suceso es una de las más angostas.