Tres años después de la exposición al público de su estudio informativo, el Ministerio de Fomento acaba de dar nuevos pasos para diseñar la prolongación de la autovía A-57 desde Pontevedra hasta Barro. Ambos municipios acaban de recibir nueva documentación técnica sobre el tramo entre Pilarteiros y el enlace de Curro, donde el vial conectaría con la AP-9 y la autovía do Salnés. Este nuevo diseño mantiene en su práctica totalidad el trazado de 10 kilómetros presentado en marzo de 2013, pero introduce modificaciones en el trecho final, al diseñar una nuevo rotonda de conexión en la carretera de Vilagarcía, un kilómetro antes de lo previsto inicialmente.
El objetivo de este proyecto es dar continuidad hacia el Norte al tramo de la circulación de Pontevedra, que ya se ejecuta entre Vilaboa y Marcón, y su segunda parte, desde Marcón hasta Xeve, mediante un vial de alta capacidad de diez kilómetros hasta el nudo de Curro, El estudio informativo inicial analizó una treintena de alternativas, entre los 9,3 y los 13 kilómetros, si bien Fomento optaba por la denominada Alternativa CO-3, que ahora se modifica ligeramente con este nuevo plan de Mejoras".
Modificaciones
La documentación remitida ahora a los concellos detalla que el trazado mayoritario es "común en planta con el de la CO-3 en toda su longitud y, en alzado, desde su inicio hasta el kilómetro 9 aproximadamente", un kilómetro antes de la iglesia de Curro. Es en este sector final de 950 metros donde se introducen cambios "con el objetivo de mejorar la integración del tronco de la alternativa entre las zonas de núcleo rural de la parroquia de Curro, deprimiendo ligeramente la rasante para cubrir las calzadas en los puntos en los que es necesario mantener la permeabilidad transversal mediante dos falsos túneles de 160 y 90 metros de longitud, respectivamente. De esta manera, se elimina y reduce el efecto barrera de la trinchera existente en la PO-531 y la prevista por la alternativa CO-3, conectando ambas partes del barrio actualmente divididas por la PO 531". En concreto, se diseña una nueva rotonda que remodela la fisonomía actual de la zona, según explicó ayer al alcalde de Barro, Xosé Manuel Fernández Abraldes.
Fomento indica al respecto que "se modifica la ubicación del semienlace de la A-57 con la PO-531 situándolo a unos 950 metros hacia el origen del trazado con respecto a la ubicación propuesta inicialmente, de manera que es posible completar dicho semienlace con los movimientos entre la A-57 en dirección a O Salnés, AP-9 y Vilagarcía, y la PO-531, al no verse afectado el yacimiento arqueológico de la Iglesia de Curro y existir una distancia suficiente entre los ramales que completan estos movimientos y los de salida y entrada del enlace de Curro".
Al margen de lo dispuesto en el último kilómetro, el recorrido de esta variación es idéntico al planteado hace tres años. Así, nace en la carretera PO-223 a la altura del lugar de Pilarteiros (parroquia de San Andrés de Xeve) "en el enlace previsto con la citada carretera en el proyecto de construcción de la autovía A-57, tramo A Ermida-Pilarteiros, y como prolongación del trazado del tronco de autovía en dicho tramo". Se explica que desde este punto, la futura autovía "discurre en paralelo al cauce del río Verducido y la carretera autonómica PO-224 hasta el kilómetro 1,5, donde comienza a girar hacia el Oeste y cruza el río Verducido en el punto de menor presencia de vegetación de ribera mediante un viaducto de 280 metros".
A continuación "penetra en la parroquia de Verducido bordeando su parte Sur sin afectar a los núcleos de población, y cruza la cresta montañosa que separa las cuencas del río Verducido y del río Rons entre los parajes denominados Outeiro dos Cans y Monte Redondo, sin afectar a los elementos arqueológicos presentes en dicha zona, y discurre a media ladera de forma paralela al río Rons".
Ya en la parroquia de Cerponzóns, "el trazado vuelve a girar hacia el Oeste para cruzar el encajado valle del Rons mediante un viaducto de 560 metros. Una vez salvado este cauce, el trazado se dispone de manera paralela a la N-550, atravesando el límite que separa los términos municipales de Pontevedra y Barro". En este punto se diseña un enlace de conexión con la N-550, que permitirá todos los movimientos posibles. Pasado este enlace, el trazado desciende "por la ladera del paraje denominado A Barbeita, próximo a restos de valor arqueológico, pero sin afectarlos. Vuelve a girar el trazado hacia el Oeste y cruza bajo la N-550 en el kilómetro 7 aproximadamente, bordeando por el norte el núcleo de San Amaro (parroquia de Portela), a más de 300 metros de distancia". Con un viaducto de 440 metros cruza el arroyo de San Amaro, el Camino de Santiago y el nuevo trazado del AVE y 600 metros más adelante lo hace sobre la AP-9. En este recorrido por Barro apenas se realizan cambios hasta llegar a Curro.
