El incendio en Pontevedra que ayer por la noche arrasó un edificio en A Ferreiría se extinguió a las 3.30 horas, tras siete horas de lucha contra las llamas. Desde esta mañana los bomberos realizan labores de retirada de escombros y de las partes que corren riesgo de desprendimiento. Aunque se mantiene un perímetro de seguridad en torno a la fachada del edificio, ya se puede circular por las calles Michelena y Soportales.

Tras descartar la presencia de monóxido de carbono, se procedió a lo largo de la mañana a devolver las llaves de los pisos de los edificios adyacentes para que los residentes puedan regresar a los mismos. Entre ellas, las doce personas que el Concello tuvo que realojar en un hotel. Todo el inmueble, de dos plantas y un bajo, resultó calcinado, y las causas del fuego todavía se desconocen.

La Policía Científica ha estado interrogando a los propietarios de esta construcción y a testigos para tratar de esclarecer el origen y hoy podrán acceder al interior del local para determinar incluso en qué parte fue en la que comenzaron las llamas, han dicho a Efe fuentes cercanas al caso.

El incendio se declaró en un emblemático edificio de la plaza de A Ferrería ayer en torno a las 20.30horas, en pleno centro histórico de Pontevedra, que resultó calcinado, y en el que dos personas, afectadas por inhalación de humo, fueron evacuadas al hospital Montecelo.

En las labores de extinción participaron bomberos de Pontevedra y del Morrazo, además de Protección Civil de Pontevedra y Poio, y el 112 alertó a los efectivos de los parques de Ribadumia y Vilagarcía, mientras que los de Vigo se ofrecieron a colaborar.

La concejala de Seguridad Ciudadana, Carme da Silva, precisó que una de las personas desalojadas fue una mujer de avanzada edad que tenía problemas de movilidad.

Las reiteradas explosiones del cuadro eléctrico provocaron la sucesiva ampliación del área, restringiendo el acceso a los cientos de ciudadanos que se arremolinaban para ver el suceso.

A medida que la estructura interior del edificio se fue desplomando, la intensidad de las llamas se fue reduciendo, facilitando la labor de las fuerzas y cuerpos de seguridad.

El primer aviso del fuego lo dio un particular, sobre las 20.45 horas, según la concejala de Seguridad Ciudadana, que transitaba por la calle Michelena y tras detectar la presencia del fuego inmediatamente alertó a los bomberos.