La Diputación estudia la posibilidad de ser la impulsora de una red de ciudades y villas amigas de los niños en la provincia siguiendo las líneas del investigador italiano Francesco Tonucci.
La propuesta para hacer una red provincial por parte del sociólogo surgió con motivo de la participación del vicepresidente provincial César Mosquera en el congreso de Roma "Autonomía y salud. La autonomía del movimiento de niñas y niños: una necesidad para ellos, un recurso para la escuela y para la ciudad", donde el diputado César Mosquera explicara que el modelo Pontevedra quiere ser ejemplo para toda la provincia.
La filosofía del proyecto de "Ciudad de los Niños" de Francesco Tonucci rechaza una interpretación de la ciudad exclusivamente de tipo educativo o simplemente de ayuda a los pequeños: su modelo tiene desde el principio una motivación política que es trabajar cara a una nueva filosofía de gobierno y tomar a los niños como parámetro y garantía de las necesidades de todos los ciudadanos. "No se trata de aumentar los recursos y servicios para la infancia, se trata de construir una ciudad diversa y mejor para todos, de manera que los niños puedan vivir una experiencia como ciudadanos, autónomos y participativos", explicó Tonucci en las jornadas de Roma.
El investigador italiano señaló que la degradación de la mayor parte de las ciudades está provocada, en gran parte, por la decisión de privilegiar las necesidades de los ciudadanos adultos, hombres y trabajadores como prioridad económica y administrativa, lo que afecta a todos los ciudadanos, especialmente a los más débiles y a los más pequeños. "El poder del ciudadano adulto trabajador se demuestra claramente debido a la importancia que el coche adquirió en nuestra sociedad, condicionando las decisiones estructurales y funcionales de la ciudad, creando graves dificultades para la salud y la seguridad de todos los cidadanos", dijo.
César Mosquera manifestó que la Diputación considera que la filosofía de Tonucci entronca perfectamente con lo que la Diputación quiere desarrollar en la provincia para conseguir que las ciudades y villas mejoren con el fin de ser cómodas, amables, seguras y accesibles, garantizando la movilidad de todos los sectores y no solo de los vehículos, especialmente de los niños (cuestión que ya se recoge en el decálogo de actuación en las vías provinciales remitido a los alcaldes).
Sentir de los alcaldes
En este sentido, el vicepresidente destaca que cada villa tiene que decidir si trabaja para que su espacio público se convierta en un espacio de autonomía infantil o trabaja con otros horizontes y prioridades. "Tenemos que pensar las villas que queremos. En cualquier ámbito de la naturaleza si un entorno no es seguro para las crías de cualquier especie significa que no es seguro para esa especie. Si nuestro entorno no es seguro para los niños, será que tampoco es seguro para los demás", dijo.
Mosquera senala que se realizará una reunión informativa con el fin de pulsar el sentir de los alcaldes de la provincia.
