La estrategia, basada en los ejes de "ciudad inteligente, sostenible e integradora", ya está plenamente diseñado y en materia de reforma urbana se han marcado los objetivos del norte del casco viejo, el entorno del Mercado y del río y el barrio de O Burgo; las parroquias de Salcedo, Lourizán, Tomeza y Marcón, al sur del casco urbano; y el río de Os Gafos. Estos fondos Feder 2014-2020 se presentan como la última oportunidad de Pontevedra de optar a ayudas europeas directas, si bien mediante el filtro del Gobierno central. Se estima que tras la presentación de la candidatura, el 13 de enero, cuatro meses después, entre mayo y junio, estará decidido el reparto con la previsión de seleccionar a tres ciudades gallegas de más de 50.000 habitantes. El gobierno local confía en que los criterios de selección no incluyan "afinidades políticas".

Por el momento, el BNG ya tiene no solo seleccionadas sus ideas, sino incluso con asignación económica. Así, en el apartado de "ciudad inteligente" se reservan dos millones de euros para la aplicación de nuevas tecnologías, un capítulo en el que se apuesta, de entrada, por implantar la administración electrónica, otra de las asignaturas pendientes del Concello pese a que se trabaja en ella desde hace más de un año.

Aplicaciones para móviles

La pretensión, demasiado ambiciosa a la vista del estado actual del proceso, es lograr que se puedan reservar telemáticamente, mediante los dispositivos móviles, las instalaciones sociales y deportivas, conocer el grado de ocupación de los aparcamientos públicos solo con echar un vistazo al teléfono, crear una guía turística oficial de Pontevedra o disponer de una aplicación compatible con dispositivos móviles de información de las rutas de senderismo y espacios naturales locales.

También se aspira a contar con un modelo similar para reunir todos los elementos turísticos, promoción de la hostelería local y la programación cultural en función de la geolocalización.