Las Guardia Civil apunta, tras las investigaciones realizadas en este año y medio, que la heroína era transportada desde Holanda hasta Galicia para posteriormente ser distribuida en la comunidad gallega y en el norte de Portugal. Según sus cálculos, en el último año habrían distribuido más de 100 kilos de heroína y realizado transacciones de efectivo que rondarían los dos millones de euros. Los investigadores subrayan que "considerando que la heroína es una droga de mercado minoritario en la sociedad actual, la cantidad de la droga manejada da idea de la capacidad de la organización desmantelada y la importancia de la operación".

Cuatro supuestos delitos

A los nueve detenidos se le imputa su presunta pertenencia a grupo criminal, así como los supuestos delitos contra la salud pública, tenencia ilícita de armas y falsedad documental. Uno de ellos, además, utilizaba documentación de identidad falsa, posiblemente por estar requerido por su vinculación con otros hechos delictivos que son también objeto de investigación.

Cuatro de los arrestados pasaron el pasado martes a disposición judicial, que decretó su ingreso en prisión comunicada y sin fianza. Entre las personas que fueron trasladadas ese día a los juzgados de A Parda figura un natural de Poio, de etnia gitana, y muchos residentes en el poblado de O Vao acudieron a la zona para acompañarlo, si bien no establecieron contacto alguno con él.

La Guardia Civil explica que la operación fue dirigida por el Juzgado de Instrucción número uno de Pontevedra y por la Fiscalía antidroga de la provincia, y fue realizada por el Equipo Contra el Crimen Organizado, (ECO), de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil con sede en Pontevedra, en colaboración con la Policía Judiciaria de Oporto (Portugal) y otras Unidades de la Guardia Civil de las zonas de intervención.