Hasta el próximo día 30 puede contemplarse en la Galería Sargadelos la exposición titulada "Luz. Trazo. Gesto", un nueva oportunidad para conocer el trabajo de una autora perteneciente a una familia de artistas y arquitectos y que a pesar de su juventud ya expone su obra desde hace más de una década en instituciones públicas y privadas de la Península.
-¿Qué es "Luz. Trazo. Gesto"?
-Es una propuesta especial porque a diferencias de otras exposiciones anteriores que eran casi monotemáticas, que se centraban en un solo tema como puede ser el paisaje o las marinas, en esta ocasión mezclo varios de mis estilos, obras de distintas técnicas, es una muestra que me hace especial ilusión porque muestra varias de mis facetas".
-¿Son trabajos de los diferentes épocas?
-Si, aunque son todos bastantes recientes, hay unas ilustraciones que tienen ya un par de años y que aparecieron en una carpeta medio olvidada que tenía por ahí y me gustó mucho encontrarme con ellas y por ellas quise exponerlas.
-En paralelo a la exposición se ha presentado un libro de haikus que ha ilustrado ¿cómo ha sido la experiencia?
-Ilustrar un libro de haikus fue un proyecto muy bonito, me lo propuso un amigo escritor y trabajamos de la mano, yo ilustré directamente cada uno de sus haikus, siempre me gustó ilustrar kaikus porque creo que tienen mucho que ver con mi forma de pintar en cuanto al concepto de sencillez, de acumulación de sentimientos, de ritmo pausado; además mi pintura tiene un aire oriental, también intenta ser muy concisa, no dar una pincelada de más sino plasmar una idea con los trazos justos y los gestos justos, así que resultó muy bonito el proyecto.
-¿Es la poesía un arte muy próximo a la pintura?
-Creo que si, que poesía y pintura están muy próximas, sobre todo en relación a ciertos tipos de pintura, la mía no intenta ser muy descriptiva sino más bien evocar una emoción o un paisaje, una imagen en la memoria, y en eso tiene que ver con la poesía, no es tanto una descripción concreta sino una evocación.
-Estudia arquitectura, también pinta y se expresa mediante fotos y vídeos ¿en qué expresión se siente más cómoda?
-Todavía no soy arquitecta del todo (sonríe) no acabé la carrera pero sin duda es con la pintura, con el dibujo que me siento más cómoda; también creo que tiene mucho que ver una cosa con la otra, la arquitectura con la pintura, después también me metí un poco en la fotografía, en el vídeo, pero al final la pintura es la única constante que siempre ha estado ahí y el motor que me mueve.
-¿Cómo es su método de trabajo? ¿Es muy disciplinada?
-Soy disciplinada, procuro forzarme a pintar o al menos a dibujar todos los días, creo en eso de que la inspiración te pille trabajando (sonríe) y también por no perder mano, porque es como en todo, en cuanto pasas unos días sin practicar aquello a lo que te dedicas pierdes un poco de soltura; entonces si, pinto todos los días, muchos acabo muy cabreada porque no sale nada y otros días me sorprendo y sale algo que realmente me agrada.
-Reside actualmente en Portugal, en Oporto
-Si, estoy allí desde el año pasado, cuando retomé mis estudios de Arquitectura en la Facultad de Oporto. Al mismo tiempo lo compagino con la pintura y me planteo como proyectos inmediatos acabar la carrera (sonríe), seguir exponiendo y siempre que sale una colaboración como el libro de haikus lo acepto porque me ilusiona mucho, más allá del beneficio económico te cargan mucho las pilas y seguir exponiendo y trabajando es lo que más me apetece.
