Seis de cada 10 niños gitanos no finaliza la Secundaria, un déficit educativo que cercena sus posibilidades laborales, amen de sus sueños; y todos los escolares deberían de poder cumplirlos e intentar ser piloto, médico o astronauta, como recuerda la nueva campaña de la Fundación Secretariado Gitano. Ésta trabaja en Pontevedra con 16 niños y adolescentes para que no dejen sus estudios, hace seguimiento de otros 68 escolares e imparte aulas de refuerzo para 20.

El hashtag Leonor deja la escuela o la página www.laleonoreal.org no hacen referencia a una princesa pero si a una niña real. "Es de Santiago, tiene 9 años, no ha dejado la escuela pero si no se trabaja con niños como ella probablemente la acabará dejando", explica la concejala de Benestar Social, Carmen Fouces, que ayer acompañó a María José Ovelleiro, coordinadora de la Fundación Secretariado Gitano en Pontevedra, para dar a conocer el balance de resultados de trabajo de esa organización en la ciudad del Lérez.

El municipio cuenta con unos 800 vecinos de etnia gitana, si bien de los programas de Secretariado también se benefician residentes en Poio, Marín, Vilaboa etc.

Durante este año atendió a 162 personas y de nuevo en este 2015 la formación laboral de los adultos y la educación en las primeras edades y adolescencia han sido su grandes áreas de trabajo.

En el primer caso se consiguieron 51 contratos para 38 personas. Son adultos "que ven como les piden en las entrevistas requisitos, entre ellos tener la ESO, y la formación de los niños depende de las familias y es importante que sus padres se den cuenta de que se necesita o en el futuro sus hijos estarán en esa misma situación".

En su apuesta por la formación ocupacional, Secretariado Gitano impartió cursos de dinamización de actividades infantiles, peón forestal, operarios de carretillas elevadoras, manipulador de alimentos, auxiliar de carnicería y pescadería etc. "Tratamos de que todos tengan prácticas en empresas", indica la portavoz de Secretariado Gitano, tanto para mejorar la capacitación de los alumnos como para derribar prejuicios entre los empleadores "y que se den cuenta de que funcionan en el puesto de trabajo".

Por su parte, para los más jóvenes y para las familias están pensados los programas vinculados a la educación, que llegan a 44 familias. Se realiza un seguimiento escolar de alumnos de 12 centros educativos con los que se coordina Secretariado Gitano, que hace de puente llegado el caso entre los colegios y las familias a fin de evitar el absentismo escolar.

También pone en marcha aulas de refuerzo para 20 escolares. Se busca en general, recordó Carmen Fouces, que la infancia de estos niños sea "lo más semejante posible" a la de cualquiera de sus compañeros, con clases pero también talleres lúdicos y otras ofertas en un escenario de ocio intercultural.

Un programa especial es Promociona, cuyo objetivo es "favorecer la normalización educativa del alumnado gitano para conseguir tasas más elevadas de éxito académico en el último ciclo de Educación Primaria y en Educación Secundaria Obligatoria, y promover la continuidad en los estudios medios y/o superiores y formación profesional".

Durante este curso se trabaja con 16 niños y adolescentes, actualmente matriculados entre quinto de Primaria y segundo de Secundaria. La previsión es que el próximo año "podamos graduar alguno", un paso más para intentar atajar el abandono escolar en una comunidad que no considera prioritaria la educación y en la que las familias carecen de referentes de miembros formados que puedan incentivar a otros a seguir su ejemplo y estudiar.