Los vecinos del portal número 5 de la calle Palamios denunciaron ayer ante la Policía un acto vandálico que sufrieron en su portal con la quema intencionada del portero automático que quedó totalmente destrozado.
El incendio no tuvo mayores dimensiones debido a que, según explicaron los propios afectados, los trabajadores de un bar próximo se percataron de la existencia del fuego y lograron apagarlo de inmediato utilizando sus extintores.
Los vecinos están molestos no solo por los daños causados, sino por que es ya la segunda vez que ocurre un acto de estas características. El primero de ellos tuvo lugar el pasado martes también de madrugada cuando se produjo un primer intento de calcinar el telefonillo que no fructificó y que solo causó daños leves.
No obstante, sobre las tres de la madrugada de ayer los vándalos lo volvieron a intentar y esta vez lo consiguieron calcinando por completo el telefonillo.
Los vecinos dicen no tener "ni idea" de la razón por la que son objeto de estos ataques por parte de los gamberros aunque creen que puede estar relacionado con el hecho de que se impida sentar en el portal a muchos jóvenes que, debido a la cercanía del instituto, ocupan normalmente este espacio.
Consideran que esta prohibición de sentarse allí pudo sentar mal a algunos de los jóvenes con este resultado. Y es que, por otra parte, no encuentran otro motivo para explicar estos actos vandálicos dado que "en este edificio somos gente normal, mayores, nos conocemos todos y no tenemos ningún conflicto vecinal".
