El gobierno local mantiene, al menos por el momento, la celebración del polémico pleno de los presupuestos para mañana lunes. No hay constancia de que el ejecutivo haya atendido la petición formulada por escrito por el grupo municipal del PP para que se aplace la sesión plenaria debido a la baja de última hora de uno de los ediles del Partido Popular, César Abal, después de que haya sido citado para ese mismo día en el CHOP para realizar una operación quirúrgica de carácter menor.
Ante la falta de respuesta por parte del gobierno local, el Partido Popular apeló a la "cortesía" del ejecutivo del BNG para que "levante" a uno de sus ediles durante la votación de los presupuestos para equilibrar la votación en consonancia con el resultado emanado de las urnas el pasado 24 mayo, una cita en la que recuerdan que el electorado pontevedrés dibujó una Corporación con un BNG al frente del gobierno pero en minoría. A la espera de lo que pueda suceder mañana, parece que el grupo de gobierno tampoco se plantea por el momento esta opción.
Así las cosas, el gobierno en minoría del BNG podría ver como finalmente salen adelante los presupuestos elaborados por el ejecutivo para el próximo año a pesar de que toda la oposición había manifestado su voto en contra contra este documento. El empate a 12 votos por la ausencia de César Abal dejaría la aprobación de este punto en manos del alcalde con su voto de calidad de tal forma que los nacionalistas evitarían la primera "pinza" de la oposición en un asunto realmente relevante para la ciudad como son los presupuestos. Anteriormente el PP, Ciudadanos, Marea y el PSOE habían unido sus votos pero para rechazar cuestiones menores, siendo quizá la más relevante la creación de una comisión para reactivar el PXOM que se creó gracias a los 13 votos favorables de los partidos ajenos al gobierno.
En medio del puente
La fecha elegida para la celebración del pleno de los presupuestos, en medio del puente de la Constitución, ya había sido vista con recelo desde algunos de los partidos de la oposición que sospechaban de un intento de los nacionalistas por "pillar" a algunos de los ediles de la oposición de viaje durante estos días festivos y lograr así una baja que les permitiese sacar adelante los presupuestos. Finalmente esta baja se va a producir, aunque por una razón bien distinta como es una operación hospitalaria.
