El Concello se ha comprometido a estudiar la posibilidad de crear un comedor social para los domingos y festivos, jornadas en las que cierra el servicio que ofrece desde hace años la comunidad de los Padres Franciscanos y que atiende a una media de 110 personas diarias. Todos los grupos municipales apoyaron la propuesta al respecto de Marea, destinada a disponer de una alternativa de manutención para estas personas en esas jornadas que cierra el comedor de San Francisco.

Aunque todos aplauden la idea y felicitan a Marea, la concejala de Benestar, Carme Fouces, admite que "será complicado" llevarla a la práctica, no tanto por la necesidad de habilitar un espacio para ello y financiarlo, sino por la localización de personas que lo atiendan. "Será difícil encontrar a otro grupo de voluntarios que se haga cargo", explica. Aún así admite que "seguiremos trabajando" para encontrarlo.

Según los datos reunidos por Marea, el 70% de los usuarios del comedor de San Francisco son hombres y más de un tercio están por encima de los 65 años, aunque la media de edad descendió en los últimos años, ya que un porcentaje parecido se sitúa entre los 30 y los 45 años y pide en la calle.