La Concellería de Economía e Facenda de Pontevedra acordó incrementar en 627.567,91 euros el pago que el Concello de Pontevedra tiene que hacer el próximo 30 de noviembre a Sogama. Según el convenio rubricado hace unas semanas entre el alcalde y el presidente de Sogama para regular los pagos atrasados ganados por la Sociedade galega do medio ambiente en sentencias firmes, en esa fecha el Concello tendrá que abonar a Sogama 2.686.736,54, a lo que el Ayuntamiento sumará más de 600.000 euros, por lo que la cuantía final quedará en 3.314.304,41 euros.
Según explicó el concejal de Economía e Facenda, Raimundo González Carballo, la obligación legislativa respeto al superávit del anterior presupuesto solo tiene tres vías de uso: la amortización de créditos; el destino a inversiones financieras económicamente sostenibles; o al pago de proveedores.
El Concello destinó 2 millones de euros a la ejecución de obras en el rural, basándose en el segundo supuesto de las autorizaciones legales, y ahora decide destinar estos más de 600.000 euros a pago de proveedores. "De lo contrario habría que darlo para la amortización del préstamo y el gobierno entiende que es más ventajoso destinado a la amortización de la deuda de Sogama", explica Raimundo González.
El concejal de Economía aclaraba que esta decisión se puede tomar "sin que sufra el funcionamiento del Concello, la atención a los vecinos ni las inversiones, dada la capacidad de financiación que tiene el Ayuntamiento".
Partido Popular
Por su parte, el presidente de la Comisión de Economía e Facenda de Pontevedra, Rafael Domínguez (PP), convocó formalmente ayer este órgano, en el que incluyó en el orden del día el análisis y la valoración del presupuesto municipal 2016.
Tal y como habían anunciado el pasado 16 de noviembre, los populares, ante el estancamiento de la tramitación de los presupuestos para el próximo año, quieren que todos los grupos políticos muestren sus posicionamientos sobre el documento.
"A día de hoy el único grupo que no hizo manifestación pública sobre sus intenciones es el grupo mixto-Ciudadanos, y esta situación no puede alargarse eternamente" señaló Rafael Domínguez, quien manifestó a continuación sus sospechas sobre el papel que Ciudadanos viene manteniendo como "chaleco salvavidas del BNG".
"Nosotros fuimos el primer grupo en hacer un análisis profundo del borrador de los presupuestos, y los primeros en determinar nuestras propuestas que pasan irremediablemente por una rebaja en la carga fiscal que soportan los pontevedreses", señaló. "Pagamos impuestos como los que más pero tenemos servicios como los que menos" reiteró el edil popular, quien destacó que "desde que Lores llegó a la Alcaldía, hace dieciséis años, la recaudación del gobierno municipal no dejó de crecer: tanto los impuestos directos (145%), los indirectos (86%) y las tasas, precios públicos y otros ingresos (107%). Unas cifras abrumadoras".
"Los pontevedreses pagamos este año 250 euros más en impuestos que el promedio de los vecinos gallegos, un 71% más, y también somos el Concello con menor gasto social por habitante junto con Teruel. Además, en Pontevedra no contamos ni con transporte público, ni con guarderías municipales, ni con biblioteca municipal, etc., nos parecen totalmente injusto", denunció Rafael Domínguez.
El edil popular recordó que para este próximo año el gasto corriente se incrementa en 2,2 millones de euros, y el IBI que para este año tiene una recaudación de 16,7 millones de euros -incluidos el millón de euros obtenidos gracias a la inspección fiscal llevada a cabo- se incrementa hasta los 18,3 millones de euros. "Los pontevedreses no padecemos presión fiscal, sino opresión fiscal", sentenció Rafael Domínguez.
