Tres pontevedreses, Benjamín C. T. y Ana Isabel V. O. (ambos nacidos en Sanxenxo), así como José María D. P. (natural de Moraña), reconocieron ayer ante las magistradas de la Sección Cuarta de la Audiencia Provincial de Pontevedra que formaban parte de una red que transportó un alijo heroína de cierta importancia desde el sur de la península hasta Pontevedra. Los tres también inculparon con su declaración a quien señalan como "jefe" del grupo o, al menos, la persona que disponía de los contactos en el sur de los proveedores de la droga. Se trata de un ciudadano de origen albanés, Erion M., quien niega los hechos.

Según reconocieron ayer, los dos varones José María y Benjamín eran meros transportistas que trabajaban a sueldo de Erion. Aseguran que éste les ofreció unos 5.000 euros por realizar el viaje a Murcia en busca de un alijo de heroína. Una vez allí les dio las indicaciones para recibir este paquete de casi diez kilos de droga y transportarlo en coche de vuelta a Pontevedra en donde fue interceptado por los agentes de la Policía Nacional en una caleta en el coche de uno de ellos.

La tercera acusada era pareja sentimental de Erion. Ratificó que los otros dos acusados eran meros transportistas mientras que su novio era quien lideraba el grupo. Reconoció que ella lo auxilió a la hora de realizar algunas comunicaciones o concertar citas por vía telefónica y que Erion era "quien tenía los contactos" que facilitaban la droga. "Yo hablaba con la gente que él me decía", explicó ayer esta mujer, que ya no tiene ninguna relación con el principal acusado. Al igual que los otros dos compañeros de banquillo que reconocieron los hechos, Ana Isabel dijo estar muy arrepentida por unos hechos que mantienen a los cuatro acusados en prisión preventiva.

Esta mujer también aseguró que el alijo que interceptó la Udyco de la Comisaría de Pontevedra en mayo de 2014 y que dio lugar a este juicio no era el primer envío de heroína que organizaba Erion.

Aunque estos tres acusados sí confesaron los hechos, matizaron que no se muestran de acuerdo con la pena que solicita la fiscal.

El reconocimiento de los hechos permitió, no obstante, que la Fiscalía rebajase las penas que reclamaba inicialmente para estos tres acusados al aplicar el atenuante de confesión. Inicialmente pedía una condena de 9 años y medio para cada uno de los acusados por dos delitos de tráfico de drogas y otro de integración en grupo criminal. Esta petición se mantiene inalterable en el caso de Erion M.

Atenuante de confesión

Sin embargo, modificó sus conclusiones en el caso de los otros tres acusados. Para Ana Isabel V. O. solicita una condena de cuatro años y medio y un millón de euros de multa como cómplice del delito de tráfico de drogas. En cuanto a Benjamín y a José María, el Ministerio Público reclama que la condena sea de 6 años y un día de prisión y la multa de 1,5 millones por el delito de tráfico de drogas. También reclama otros seis meses de prisión para cada uno de estos tres acusados por el delito de integración en grupo criminal, pena que sería conmutable por trabajos en beneficio de la comunidad.

En el caso de Erion, además de la pena de prisión el acusado se enfrenta a una petición de multa de dos millones de euros.

El letrado que defiende los intereses de este ciudadano albanés solicitó al tribunal que declare la nulidad de las escuchas telefónicas y, por lo tanto, de las actuaciones que se realizaron con posterioridad. El juicio quedó visto para sentencia.