Sabela González, vecina de Caldas de 26 años, viajará a París en el próximo puente, del 5 al 8 de diciembre. Lo hará con su pareja y dos amigos más.
"Esperaremos estas dos semanas a ver qué pasa, pero si me preguntas a día de hoy si voy a ir ya te digo que sí", dice convencida.
La joven caldense compró su viaje a través de internet hace ya un mes. El grupo volará desde la ciudad portuguesa de Oporto con la compañía de bajo coste Aigle Azur y se alojará en un apartamento alquilado, a través de la plataforma Wimdu, que se encuentra al lado de uno de los monumentos más emblemáticos de París, la basílica del Sacré Coeur.
"Nos ha salido todo por muy buen precio, unos 300 euros cada uno, así que esperaremos hasta el último momento para ver qué hacemos", afirma.
Lo cierto es que el grupo ha hablado mucho entre sí desde que ocurrieron los atentados, pero algunos de ellos, "como mi pareja", lo han tenido claro desde el primer momento y se niegan a dejar de viajar por una causa así.
"Mi pareja no tiene miedo. Una de mis amigas sí que se lo está pensando mucho, pero yo creo que con miedo no vas a ningún lado", asevera la joven.
Apoyo familiar
Respecto a su familia, Sabela González asegura que cuenta con su apoyo para viajar. "Mi madre me dice que vaya, que no me lo pierda".
En lo único en que la caldense ha cambiado de opinión es en el hecho de no llevar a su hija, de tan solo un año de edad con ella. "Tenía su billete y todo, pero, si en el peor de los casos pasase algo, que por lo menos ella esté a salvo", dice.
Entre otras cosas, la joven dice no tener miedo porque ya viajó a Túnez. "Fue en una época en la que habían atentado en hoteles de la ciudad", explica.
Es consciente de que estos días París no será el mismo, pero ello no le echa atrás en su escapada, que le servirá para desconectar de la jornada laboral. "No sabemos muy bien qué nos vamos a encontrar, pero iremos".
