La concejal delegada de Lérez, Pilar Comesaña, expuso a su consejo parroquial diversas obras, entre ella la segunda y definitiva fase de acondicionamiento de la zona de A Gándara, con un presupuesto de 250.000 euros. El paso de una calzada romana y de un tramo del Camino de Santiago obligó a hacer una catalogación patrimonial del espacio, un trabajo realizado por la Xunta y que explica el retraso de los trabajos programados. También se acometerá el asfaltado y el ensanche en varios tramos de la carretera que va desde A Piolla a Casalnovo, por 190.000 euros más.

Para el próximo año está previsto asfaltado de una pequeña zona de A Fontaiña que está en malas condiciones y que conectará con el vial a Monte Porreiro. En esa zona también se arreglará el camino que pasa por el río. También explicó que se está pendiente del permiso de Fomento para la colocación de semáforos de pulsar en los cruces de las zonas de Casaldorado-Cendona y A Ferrería-Ramallás.

Además los técnicos municipales realizan estudio de tráfico en el contorno en el lugar de O Crucero, a petición de la dirección del centro y de la asociación de padres, preocupados por el riesgo que sufren los niños que llegan andando al colegio.

El consejo vecinal de Lérez comunicó a la concejala su decisión de dar prioridad al adecentamiento del lugar del Ramallás, para hacer allí el núcleo de centralidad de la parroquia.