Pontevedra se emocionó ayer con la historia de amor imposible entre una joven cortesana enferma de tuberculosis y su amante. "La Traviata", de Giuseppe Verdi, fue representada en la ciudad de la mano del Teatro de la Ópera Nacional de Moldavia.

El auditorio de Afundación se llenó para acoger la adaptación teatral de "La dama de las camelias", de Alejandro Dumas, este drama en tres actos, cuyo título original era "Violetta".

Bajo la dirección de Nicolae Dohoratu, la ópera contó con la participación de solistas internacionales como Natalia Golub, Petru Racovita y Rodica Picirenau en los papeles de Violeta, Giorgio Germont y Anina, respectivamente, y el tenor español Miguel Borrallo en el papel de Alfredo Germont.

Cerca de noventa personas, entre la orquesta, el coro, los solistas y los figurantes, protagonizaron el espectáculo, que, como es habitual, lució un vistoso vestuario.

La Ópera Nacional de Moldavia está ubicada en Chisinau, su capital. Tras la desaparición de la URSS se ha convertido en una de las pocas compañías que tiene su propia orquesta, coros, solistas y ballet. Entre su repertorio destacan, Eugene Onegin, Madame Butterfly, Aida, Nabucco, Norma y Turandot, entre otros. Todos los años el Teatro realiza más de doscientas representaciones de ópera y ballet en países como Inglaterra, Francia y Alemania.

Nicolae Dohotaru es director titular del Teatro de la Ópera y trabaja de manera permanente en la Filarmónica de Kishinau y en la Filarmónica de Bucarest. Lleva más de 20 años dirigiendo óperas por todo el mundo, entre ellas, Aída, Turandot, Tosca, Nabucco, Las bodas de Fígaro, Carmen, Caballería, Pagliacci, Madama Butterfly, La Traviata y La Bohème.

Por su parte, Miguel Borrallo, nacido en Madrid, ha actuado como solista en numerosos teatros tanto del panorama español como internacional,.