La principal actuación pactada entre el Concello y la Diputación al final del anterior mandato es la ronda urbana entre O Marco y San Mauro, una obra que se licitó el 1 de junio. Cinco meses después aún está en la misma situación, si bien fuentes provinciales apuntaron ayer que su contratación "está próxima" y en breve podría reunirse la mesa que elegirá a la empresa constructora.
La licitación se abrió con un presupuesto de 1.795.000 euros y un plazo inicial de ejecución de nueve meses. El vial, de poco más de un kilómetro, unirá la carretera de O Pino-Bora en O Marco con la de Ponte Caldelas en San Mauro. El proyecto definitivo de la ronda mantiene el número de expropiaciones necesarias para ejecutar el proyecto en 63 fincas afectadas. Ocupará 33.473 metros cuadrados, afectará a unos 1.300 árboles y las expropiaciones rondan los 460. 000 euros que aporta el Concello A esta inversión habrá que sumar 1,8 millones de euros procedentes de las arcas provinciales, lo que supone una inversión global en esta obra de 2,5 millones de euros.
El nuevo vial entre O Marco y San Mauro tendrá algo menos de un kilómetro de longitud y su fisonomía es idéntica al vial de Lérez que desemboca en el puente de Monte Porreiro también pactado entre el Concello y la Diputación en 2008. Tendrá dos carriles de 3,5 metros de ancho cada uno, arcenes de un metro y una senda peatonal de cuatro y se añade dos nuevas glorietas a la de la PO-542: una de ellas en el entronque con Pedra do Lagarto y la otra, en su desembocadura en la carretera de Ponte Caldelas.
