Ana es la madre del niño de 12 que el pasado jueves por la noche salvó la vida casi de forma milagrosa después de que el vehículo que conducía la nuera de esta mujer, pareja de otro de sus hijos, se precipitase al mar mientras realizaba una maniobra de aparcamiento en el muelle de As Corbaceiras.

Por suerte, ambos están bien y esta mujer intentaba recuperar ayer la normalidad todavía con el susto en el cuerpo. Su hijo resultó ileso, pero tuvo que ser atendido en Montecelo tras sufrir un ataque de ansiedad. Ella resistió bien el susto hasta que en Montecelo, una vez que recapacitó sobre lo sucedido y vio lo cerca que había estado de producirse un fatal desenlace, también se derrumbó. Sufrió una crisis de ansiedad y ella misma relata que "perdí el conocimiento, me caí y me llevé un fuerte golpe en el costado".

Ana, de nacionalidad portuguesa y que reside con su familia en las proximidades del lugar del accidente, explicó que su nuera acudía acompañada de su cuñado, el hijo de 12 años de Ana, a la vivienda de esta a recoger una silla y decidió aparcar en el muelle de As Corbaceiras. "Estaba haciendo la maniobra cuando el coche se deslizó y cayó", relata. Explica que una de las ventanillas "estaba un poco abierta y rompió", de tal forma que por ahí pudieron salir los dos ocupantes del vehículo a los que un viandante arrojó un cabo desde la orilla. Ayer explicaba que su hijo ya se recuperaba ayer en su domicilio pero que "aún está en shock" por lo sucedido. En cuanto a la conductora del vehículo, explicó que salvo el susto, también se encuentra en perfecto estado de salud. De lo que están más aliviados es que a bordo del coche no estuviese un bebé que suele viajar en ese mismo vehículo, hijo de la nuera de Ana y que habría sido muy difícil de rescatar en el caso de que el coche se hundiera en la ría con él a bordo. El lugar en el que se cayó al río este coche estuvo vallado todo el día de ayer y ayer por la tarde, aprovechando la marea baja, una grúa pudo finalmente retirar el vehículo siniestrado del agua. La conductora, además, esperaba poder recuperar el sueldo del mes que acababa de cobrar en metálico y se le había quedado dentro del coche.