Algo más de un mes después de que el juzgado de instrucción número 7 de Vigo decidiese despiezar la conocida como "Operación Patos" en cinco partes y repartirlas entre diferentes juzgados gallegos, la investigación aterriza al fin en la capital. Será el juzgado de instrucción número 1 el que inicialmente deberá hacerse cargo de la instrucción de esta supuesta trama de corrupción que salpica al Concello de Pontevedra.

Cabe recordar que el pasado 24 de septiembre, la jueza instructora en Vigo dictaba cuatro autos en los que se inhibía en favor de otros tantos juzgados por supuestos hechos delictivos que entendía que deberían ser investigados en los partidos judiciales en los que se produjeron. Se trataba de Ponteareas, Ourense, Santiago y Pontevedra. En Vigo permanecía la pieza principal de la trama que afecta a instituciones como el Concello de Vigo, la Diputación o la Autoridad Portuaria. También se quedaba en la ciudad olívica una pieza separada referente al Concello de Nigrán.

De las piezas separadas, los juzgados de Pontevedra son los que asumen tras Vigo una mayor carga de trabajo en una investigación que se podría dividir en tres partes: En primer lugar se deberán analizar los supuestos amaños en la adjudicación de tres obras a la empresa Eiriña (la reparación de unos viales en Salcedo, la remodelación de la Avenida de Lugo y la de la calle Santa Clara) por valor de dos millones de euros, así como una donación de Eiriña para la Cabalgata de Reyes. En segundo lugar el juzgado deberá indagar en los supuestos "enchufes" en Cespa por parte de políticos y funcionarios del Concello de Pontevedra. La UDEF de la Policía Nacional halló en los registros a la empresa concesionaria del servicio de limpieza un documento en el que hace referencia a diferentes trabajadores con su correspondiente "mentor" entre los que figuran el alcalde, la concejala de Seguridad, Carmen da Silva, o el edil de Facenda, Raimundo González. En tercer lugar también se analizarán presuntas irregularidades en unas subvenciones recibidas por Ence utilizando para ello supuestos presupuestos ficticios aportados por Eiriña.

Una vez que el caso está ya en manos del juzgado de Pontevedra, este deberá decidir si se realizan nuevas diligencias como citar a declarar a los implicados en estas investigaciones y si lo comparecen o no en calidad de imputados. En este sentido, también serán claves las peticiones que formule el fiscal que asuma la investigación aquí en Pontevedra.