La firma del contrato de alquiler entre el Concello y los comuneros de Canicouva, que estaba previsto para hoy, ha quedado finalmente aplazado, previsiblemente hasta la próxima semana, debido a "problemas de agenda" del alcalde, Miguel Fernández Lores, que debe acudir toda la mañana de hoy a una asamblea de la Fegamp en Santiago. Aún así, el retraso no modifica las estipulaciones del contrato. La comunidad de montes de Canicouva recibirá 2.000 euros al año por cada hectárea cedida para la planta de compost (son 20.000 euros ya que se establece el uso de 100.000 metros cuadrados) así como cuarenta céntimos por cada tonelada de basura que se trate en esas instalaciones una vez que la planta esté en funcionamiento. En todo caso, la planta ocupará no más de 15.000 metros cuadrados y el resto se destinará a silvicultora. La duración es por treinta años prorrogables y la planta deberá estar en funcionamiento en el plazo máximo de cuatro años desde la firma.