El Concello ya tiene vía libre para poner en marcha de forma definitiva el Área de Rehabilitación Integral (ARI) del casco viejo, así como retomar el de Estribela, después de que la ministra de Fomento, Ana Pastor, firmara ayer con la Xunta los convenios por los que el Estado compromete la aportación de fondos para actuar en unas 158 viviendas. Tras la ceremonia de ayer, el Concello tiene que elaborar la ordenanza de ayudas y convocar su concesión para que los propietarios presenten sus proyectos y puedan optar a subvenciones con las que financiar, junto con sus propias aportaciones, reformas en sus casas.

En el caso del casco viejo, la aportación ministerial es de 624.638,45 euros, que se complementan con los fondos municipales y particulares, con la previsión de actuar en un centenar de viviendas. Esta actuación forma parte de los planes de Fomento para el periodo 2013-2016, pero el retraso en su firma y tramitación ha limitado el plazo de actuación a un único año.

Lo mismo ocurre en el caso de Estribela, si bien en este barrio el ARI ya acumula varios años de experiencia, no como en el centro histórico, donde se estrena después de tres años de espera desde su declaración como ARI. En Estribela Fomento entrega 125.361,55 euros con la previsión de actuar en 58 viviendas.

La ceremonia de ayer también implica a Marín, con 99 domicilios y una aportación ministerial de 334.313 euros, y a Combarro (Poio), que recibirá 94.22,51 euros para 16 casas.