El estado de "shock" entre los familiares más directos de Concepción Reguera es tremendo. El dolor es tal que hizo que pidiesen a los vecinos de Pontesampaio que les permitiesen despedir a la última víctima de la violencia de género en Galicia en la intimidad, evitando el velatorio que se celebró en el tanatorio de San Mauro aunque sin las habituales visitas, salvo de los más íntimos, según explicaron fuentes vecinales. Algunos miembros de la familia están recibiendo acompañamiento psicológico, según estas mismas fuentes, ante la terrible pérdida sufrida.
También solicitaron que el entierro, que se celebró ayer, fuera un acto más bien privado, aunque al final algunos vecinos no pudieron evitar trasladarse al lugar para darle el pésame a su familia y despedir a Concepción Reguera tras una breve ceremonia. Hoy a las 17.30 horas está previsto que se celebre un funeral en la iglesia parroquial.
Aunque el dolor no es comparable al de la familia de la víctima, el crimen de Pontesampaio deja a otra familia destrozada en Arcade, la del detenido como presunto autor de los hechos. El cuñado José Antonio Lusquiños publicaba el pasado sábado en internet un post bajo el título "la familia no se escoge" en el que tacha al presunto homicida de "asesino malnacido" y transmite las más sinceras condolencias a la familia de la fallecida. También pide respeto para su mujer y el resto de la familia del sospechoso, desde ayer ya en prisión, y explica que esta familia también está de luto, tanto por Conchi como por "un despreciable asesino".
Un texto que más tarde compartía también la propia hermana del detenido en su muro de Facebook, muro que a lo largo de ayer dejaba de ser público y en el que se podía ver un enorme lazo violeta, símbolo de la lucha contra la violencia de género.
