Al consejo escolar del Conservatorio Profesional de Música Manuel Quiroga de Pontevedra se le ha agotado la paciencia. Después de once años de quejas y súplicas desatendidas por parte de la delegación territorial de Educación de la Xunta de Galicia han decidido hacer público, en nombre de toda la comunida educativa, el particular padecimiento que pasan alumnos y profesores como consecuencia de las deficiencias estructurales que padece un edificio inaugurado hace poco más de una década. Están condenados a enseñar y aprender música soportando elevadas temperaturas, una situación insoportable en los meses de mayor calor pero que se deja notar en días como el de ayer en el que las temperaturas máximas fueron elevadas y el sol lució toda la jornada.

Mareos

El que es el único centro de carácter público que imparte enseñanzas regladas elementales y profesionales de música en la ciudad ve como la temperatura que se alcanza en las aulas "durante gran parte del curso escolar" son inadecuadas e "imposibilitan la docencia" llegando en algunos casos "a ocasionar golpes de calor y perdidas de conocimiento al alumnado y al profesorado, generando un problema de salud laboral en general".

El Consello Escolar hace constar que además se está incumpliendo la ley y aluden concretamente a un Real Decreto que establece que la temperatura en este tipo de centros de trabajo debe situarse entre los 17 y los 27 grados. Explican que en las fechas de mayor calor la temperatura alcanza los 34 grados lo que "convierte esta situación no solo en insostenible sino también en ilegal".

Explican que "el estado de conservación del edificio y sus deficiencias estructurales no permiten la correcta ventilación y perjudican gravemente la conservación de los instrumentos".

Por último, señalan que este hecho fue puesto en conocimiento de la administración educativa competente en "reiteradas ocasiones" a través de escritos de la Anpa o en reuniones del equipo directivo sin que a día de hoy, y después de once años de funcionamiento, tengan solución eficaz alguna, "a pesar de que en alguna ocasión la jefatura territorial ya se comprometió a realizar las correspondientes obras en el Conservatorio para solucionar dicho problema".

Ante esta situción, la comunidad educativa afirma verse "obligada" a demandar por otras vías como es la denuncia pública de esta situación las soluciones pertinentes y "actuaciones urgentes e inmediatas que permitan el ejercicio de la docencia en niveles de normalidad".