Una visita de diversos concejales del gobierno local y la oposición sirvió ayer para comprobar la conclusión de las obras de mejora del acceso a O Regueiriño, en Lourizán, desde la PO-546, la carretera vieja de Marín. Los trabajos superó el millón de euros y se ejecutó en varias fases, al incluir un nuevo asfalto, canalizaciones de aguas pluviales, medidas de calmado del tráfico y otras actuaciones. También se prevé mejorar el vial hacia A Carballeira.