Doce días después de que se realizasen los trabajos de asfaltado de las carreteras nacionales 640 y 550 a su paso por el centro de Caldas, los operarios de la obra iniciaron en la madrugada de ayer el pintado de los viales. Se trata de una reforma que ha sido tan esperada como criticada, por el mal estado de la carretera antes del asfaltado y de los problemas de seguridad que está ocasionando la falta de pasos de peatones.
Estaba siendo la comidilla en los corrillos de Caldas y generó muchas protestas en las redes sociales. La falta de pintado en las dos principales arterias del casco urbano provocó bastante malestar en el municipio. Y es que a día de ayer, continuaban aun sin pintar la mayor parte de los pasos de peatones en dos viales caracterizados por su gran densidad de tráfico, ocasionando falta de seguridad vial, una situación que se está alargando prácticamente medio mes tras el asfaltado.
En la madrugada de ayer, arrancaban las máquinas que realizan el pintado de delimitación de los carriles concluyendo en gran parte del casco urbano. Está previsto que en las próximas madrugadas se realice el pintado de los pasos de peatones, coincidiendo con las horas de menos tráfico.
De esta manera se espera poner fin a los problemas de seguridad en el casco urbano, que si bien no se registraron accidentes graves, si se notificaron varias situaciones de riesgo, al desconocer no estar definidos los pasos de peatones.
El reciente asfaltado sigue sin convencer a numerosos transeúntes por el estado en el que se encuentra, con numerosos tramos rugosos y la abundancia de gravilla. Las quejas se repiten con respecto a los anteriores trabajos de asfaltado hace un año, señalados como "parches" y cuyo posterior pintado también suscitó quejas por parte de los vecinos debido a resultado final.
