El Concello de Pontevedra iniciará en los próximos días la redacción de un informe sobre el estado de parques infantiles y espacios de ocio del municipio para conocer su conservación y fijar las demandas vecinales de este tipo de equipaciones en distintos barrios de la ciudad.

Según explicó el concejal delegado de los parques infantiles, Luis Bará, los trabajos a desarrollar en estos espacios se harán siguiendo cuatro directrices. En primer lugar se trata de continuar con el programa de conservación y mejora de los parques. El último que se realizó fue de 61.000 euros y afectaba un total de 32 parques de la zona urbana y del rural.

A continuación se trata de la reordenación, redimensionamento y, de ser el caso, reubicación de los parques. El concejal indicó que parece claro que es preciso ampliar el parque de Barcelos, y que será el prioritario en este área de cara al próximo año.

El tercer objetivo de este plan se dirige a los nuevos parques y zonas de juego, toda vez que "hay que darle la máxima polivalencia, dado que hay personas de distintas edades", explicó el edil.

Por último, se aplicará un programa de dotación de elementos para niños con discapacidades en los distintos parques infantiles.

El concejal también adelantó que se está buscando nuevos terrenos para la instalación de parques biosaudables, para la práctica de la educación física y deportiva, ya que es otra demanda de los vecinos, explicó.

Partido Popular

Por su parte, el grupo popular reiteró ayer su disconformidad con el nuevo contrato de mantenimiento y conservación de zonas ajardinadas a la empresa Cespa porque, como ya denunció el pasado mes de febrero, está "sobredimensionado". La prestación de los servicios de este contrato comenzará en los próximos días. "Un contrato que supondrá que los pontevedreses paguen por el mantenimiento de zonas verdes que en realidad no lo son", insistió el concejal popular José Luis Martín, tras la comisión de Movilidad celebrada ayer.

En este sentido, los populares recuerdan que el gobierno local contaba con dos inventarios sobre la superficie de zonas ajardinadas en las que se van a realizar los trabajos de mantenimiento: uno realizado por la anterior empresa adjudicataria en el año 2012, y otro realizado por el técnico municipal. "Ninguno de estos inventarios se tuvo en cuenta para realizar el pliego del contrato", aseguró el concejal popular, quien recordó que en el caso de los colegios la superficie a mantener según el nuevo contrato es tres veces más que la superficie real y por ejemplo en Placeres, "van a mantener y conservar una plaza que es de cemento", destacó el concejal popular.