El arousano Ramiro Vázquez Roma, quien se sienta desde el pasado jueves en el banquillo de la Audiencia de Pontevedra acusado de liderar una red que intentó introducir a través de las costas gallegas un alijo de unas cuatro toneladas de cocaína en 2007, reconoció hoy gran parte de los hechos que le atribuye el fiscal.

Roma reconoció que orquestó la parte de la operación de descarga de la droga desde alta mar hacia tierra en varias lanchas rápidas que debían desembarcar en playas de Bueu y O Grove. También detalló el papel que jugaron en este dispositivo otros de los veinte acusados que se sientan junto a él en el banquillo de la Audiencia. El supuesto líder del clan Roma reconoció los hechos que le atribuye el fiscal en su escrito pero dijo no estar conforme con la pena que solicita de 27 años de cárcel y multas que suman más de 600 millones.

Respondió únicamente a preguntas del fiscal y de su abogado y también reconoció haber puesto bienes adquiridos por él a nombre de testaferros y que estos fueron adquiridos con dinero que obtuvo de forma ilícita con el tráfico de estupefacientes. El juicio continúa en la Audiencia de Pontevedra con el interrogatorio al resto de los acusados.