Más de dos kilómetros de nuevas canalizaciones, reemplazando buena parte de su colector principal, la renovación o mejora de un centenar de pozos de registro, un presupuesto de más de 1,1 millones de euros y seis meses de plazo de ejecución. Son los datos básicos del proyecto final elaborado por el Concello para acabar, en lo posible, con los vertidos al río de Os Gafos. Decidido el verano pasado por Augas de Galicia que no acometerá las obras por los "incumplimientos del Concello" y la imposibilidad de justificar este año los fondos europeos asignados inicialmente a la obra, el gobierno local afronta en solitario los trabajos.
Ya concluyó la exposición al público del proyecto y los demás trámites administrativos previos a la licitación, pero el Concello solo dispone, a día de hoy, de 550.000 euros, es decir, menos del 49% del presupuesto de 1.126.174 euros. Medio millón está comprometido por la Diputación, a la espera de la firma de un convenio al efecto y 50.000 euros más han sido ya consignados por el Ayuntamiento para poder licitar este año los trabajos, si bien todavía precisa de la autorización de Augas de Galicia para actuar en el cauce fluvial, un permiso que podría volver a atascar un proyecto que acumule retraso desde 2010.
Varios tramos
Según la memoria elaborada por los técnicos municipales, la actuación se centra en el tramo rural (desde la estación de autobuses hasta Vilaboa) y se divide en varios tramos. En primero de ellos es el puente bajo la rúa da Estación, donde se reemplazarán unos 72 metros de la canalización existente y se instalarán tres nuevos pozos, ya que los actuales se considera que son el origen de muchos de los vertidos que padece el río. De hecho, gran parte de estos huecos, hechos de hormigón, serán eliminados y sustituidos por otros estancos de polietileno. Así, en el tramo siguiente, dentro del recinto de la estación de autobuses, se cambiarán 144 metros del colector y se renovarán cinco pozos, mientras que en el sector siguiente, desde la estación al puente del ferrocarril la longitud de tubos nueva supera los 320 metros y se instalarán 13 pozos.
Ya en la calle Otero Pedrayo está previsto apuntalar el muro del vial sobre el río, muy deteriorado y donde incluso algunas piedras cayeron al agua por accidentes e inundaciones. Por su parte, el siguiente recorrido hasta el nudo de O Pino se considera en buenas condiciones, al ser un colector de reciente construcción, ya que fue reemplazado hace unos años al detectarse un gran vertido de hormigón en su interior que atascaba constantemente el flujo de agua. El proyecto detalla que "solo se realizarán conexiones en sus extremos" para enlazar los nuevos tramos con este.
Tomeza y Salcedo
En el recorrido ya más rural, desde O Marco y O Pino por Tomeza y Salcedo hacia Vilaboa es donde se llevará a cabo una de las actuaciones de más envergadura, ya que se reemplazarán casi 1.700 metros del colector (con un diámetro de medio metro, como en todo el nuevo recorrido) y se instalarán 90 pozos. La memoria técnica detalla que "en este tramo se instalarán dos tramos de conducción que cruzarán el río bajo su lecho", lo que obligará a "llevar a cabo los respectivos desvíos del cauce para poder proceder posteriormente a la excavación de las zanjas en las que se instalarán los nuevos tramos de tubería". Pese a este corte temporal, el documento apuesta por "mantener el colector siempre en funcionamiento y afectar lo menos posible al cauce del río", por lo que se acude a la solución de "bypass" o tuberías provisionales entre distintos puntos.
También se apunta que no será necesario realizar expropiaciones ya que las obras afectan a la zona de servidumbre o policía del río, en terrenos de dominio público hidráulico, o sobre tramos ya afectados por el colector original. El plan de obra establece una ejecución de seis meses, si bien todavía no hay fecha de inicio. Al respecto, el gobierno local admite que este año "será difícil" que comiencen esos trabajos y también deberá buscar la financiación pendiente, unos 575.000 euros, probablemente de fondos propios. La primera zona donde está previsto actuar es la situada para la rúa da Estación y progresivamente trasladar las obras aguas arriba.
Paralelamente se llevará a cabo un trabajo arqueológico complementario, dada la previsión de que aparezcan restos etnográficos. Se apunta que en el ámbito de obras o su entorno existen yacimientos como el de Penedo de Vilar de Matos, los castros de Salcedo y Lusquiños o el de Ponte do Couto, así como el propio Camiño Portugués, molinos y hórreos, además de los puentes tradicionales de Valentín y A Condesa. También se hace referencia a la fuente do Gorgullón, si bien en la mayoría de los casos se apunta que el impacto sería "compatible" o sin afectar a esos restos.
