Cientos de personas -trabajadores de Ence, Elnosa y empresas auxiliares, además de familiares y representantes sociales y vecinales- acudieron ayer al pleno de la Diputación para mostrar su apoyo a la plantilla y defender la permanencia del asentamiento industrial. Lo hacían como inicio de un calendario de movilizaciones en defensa del complejo fabril, una vez que Concello de Pontevedra y Diputación Provincial han emprendido una ofensiva común para exigir que se cumpla los plazos de extinción de ambas concesiones.

En el caso del comité de empresa de Ence lo hacían invitados por la propia presidenta, Carmela Silva, quien les ofreció exponer sus argumentos ante el pleno de la corporación. A la sesión también acudieron otros colectivos, como la Plataforma Pro Industria de Pontevedra, a la que la presidenta también dio voz en el pleno. Habló además un portavoz de la Plataforma en Defensa da Sanidade Pública, ya que en la reunión se iba a tratar una moción del PSdeG-PSOE sobre el hospital de Vigo.

Pese a estas intervenciones, el grupo provincial del Partido Popular abandonó la sesión en protesta porque la presidencia no permitió intervenir a más personas, que levantaban la mano desde los asientos del público. Los populares alegaron que no se permitía hablar a los trabajadores y que no se abriesen las puertas de la Diputación a los centenares de personas que permanecían en el exterior y que no pudieron acceder al pleno por falta de aforo.

"Cerrada a cal y canto"

El portavoz del PP, Ángel Moldes, alegaba que la Diputación se había cerrado "a cal y canto" a los trabajadores de Ence, si bien el salón de sesiones estaba abarrotado de los mismos. Argumentó además que "hoy era el día de Ence", cuando no estaba previsto ningún punto sobre este asunto en el orden del día y sí una moción sobre el hospital de Vigo y la sanidad pública, que los populares no escucharon porque abandonaron la sesión antes de iniciar este debate. Los socialistas entendieron que era precisamente este punto, y los cientos de miles de personas que un día antes se manifestaron en la ciudad olívica en defensa de la sanidad pública, lo que llevó a los populares a ausentarse.

"Que vergüenza. Cuando al PP no le interesa escuchar lo que tenemos que decir abandona el pleno", lamentó Carmela Silva. La presidenta provincial reprochó además a los populares "la manipulación, la utilización" de los trabajadores en beneficio de sus intereses políticos.

Antes de romperse el desarrollo normal de la sesión, intervinieron ante la corporación provincial el presidente del comité de empresa de Ence, Pedro Soto, así como el representante de la Plataforma Pro Industria de Pontevedra, José Manuel Sánchez, ambos en defensa del complejo industrial.

Informe

Los más de 300 empleos directos en la fábrica, las aproximadamente 800 personas que cada día entran y salen de la factoría por motivos laborales y los más de 5.000 puestos de trabajo entre directos e inducidos que genera en Galicia, fueron algunos de los argumentos que expuso Pedro Soto en defensa de la continuidad de la pastera. Apuntó además unas pinceladas del extenso informe elaborado por la auditoría KPMG Asesores S.L. para la fábrica, sobre la repercusión económica de Ence en la economía local y general.

Defendió además el empleo que crea Ence, por la calidad de los contratos (más de un 90% de ellos son indefinidos), o los beneficios sociales de los que disfrutan los trabajadores de la pastera, así como las mejora ambientales y en los sistemas de producción realizados en los últimos años y que la fábrica continúa programando. Soto pidió a los diputados provinciales que antes de tomar una decisión sobre el futuro de la pastera "consulten los datos".

José Manuel Sánchez, de la Plataforma Pro Industria de Pontevedra, aludió por su parte a la falta de empresas que hay en Pontevedra y al futuro incierto que le espera a la ciudad si prescinde de sus únicas industrias. Centró su discurso en las auxiliares de Ence y el temor de éstas ante un posible cierre de la pastera. "Nos preocupa el futuro de nuestros hijos, de nuestros nietos", expuso el empresario, que preguntó a la corporación municipal "¿cuál es la alternativa?, ¿cuánto nos va a costar a los ciudadanos de la provincia este cierre?, cuestionó a los diputados provinciales.

Fue tras esta intervención y tras una hora de parlamentos ajenos al orden del día, cuando la presidenta decidió continuar con el desarrollo normal de la sesión, lo que suscitó las primeras quejas en la bancada popular. Reclamaban que pudiesen intervenir otras personas que levantaban la mano desde el patio de butacas. La mesa decidió continuar con el pleno y se debatieron y votaron dos mociones, del PP y del PSOE, relativas al sector lácteo gallego.

Antes de pasar al debate de la moción sobre la sanidad pública y el conflicto social generado por el nuevo hospital de Vigo, los populares volvieron a reclamar la palabra para los trabajadores de Ence y Elnosa, además de pedir que se dejase entrar en la Diputación a las "1.500 personas que están ahí fuera", dijo la popular Nidia Arévalo.

Bronca

Ante el nuevo rechazo de la mesa del pleno a volver al asunto de Ence y Elnosa, los diputados populares abandonaron la sesión, seguidos de los trabajadores y familiares que llenaban la sala, entre gritos y abucheos a los grupos socialista y nacionalista, que junto con el diputado de Marea continuaron tratando los asuntos del orden del día.

Ya en el exterior, el portavoz del grupo popular Ángel Moldes recriminó a la presidenta provincial que cerrase la institución "a cal y canto", que las personas que accedieron tuviesen que mostrar su DNI, -"casi hay que tener un pase VIP para entrar", dijo Moldes-, y que se les retirase las pancartas y carteles con los que trataban de acceder al salón de plenos. "Esto no pasó ni con las preferentes, que para nosotros era incómodo pero nos tuvimos que aguantar", apuntó el portavoz del PP.

En el interior, PSOE, BNG y Marea aprobaron unánimemente la moción socialista por la sanidad pública, así como los restantes puntos de la sesión, con todos los diputados del PP en el exterior de la sede provincial.

"Que no se repita"

"Espero que en próximos plenos no se repita, porque esto es una institución democrática, que merece que los 27 diputados que la integran la respeten y no traten de utilizarla para manipular a la gente. Hoy aquí sufrimos una nueva demostración de las malas prácticas políticas del PP, esa forma de actuar que tienen siempre que las cosas se vuelven en su contra", dijo Carmela Silva antes de levantar la sesión, en alusión a lo que los diputados socialistas entendieron como una forma de evitar, por parte del PP, el debate sobre lo ocurrido en el hospital de Vigo y con la manifestación que un día antes sacó a más de 200.000 personas a la calle en defensa de la sanidad pública.