Los globos azules, símbolizando la condena contra el maltrato infantil, sustituyeron las velas y rosas blancas en Caldas en el acto en el que se recordaba a las pequeñas Amaia y Candela así como las muestras de apoyo a su familia. Convocadas por iniciativa de Ana María Pastoriza e María Ríos, vecinas del municipio, los caldenses respondieron a la llamada, llegando a participar más de doscientas personas en la marcha.
"Esto es para en recuerdo de las pequeñas. No vamos a hacer mucho hoy directamente con esto, pero esperamos que ayude por lo menos a concienciar a la gente de que los niños tienen que estar al margen de las disputas de los mayores, es algo importante", indicaba Pastoriza antes de inicar la marcha. De este modo, se sumaban a las citas que se repitieron en sus diferentes formas a lo largo de la semana y que tuvo su acto central el pasado viernes en Moraña y Campo Lameiro, sobre un crimen que sobrecogió a todo Galicia.
De forma puntual, la marcha se inició a las 12 horas desde delante de la iglesia de Santo Tomás, recorriendo la calle Igrexa, As Palmeiras y la avenida Román López. Como curiosidad, la comitiva se inciaba a escasos cinco metros del despacho del abogado defensor de David Oubel, único imputado por el crimen de Amaia y Candela, y concluía a las puertas del juzgado que lleva el caso. "Solo queremos recordar a las pequeñas y pedir que no se vuelva a repetir algo así, este acto no es para pedir justicia ni se permite increpar en contra de nadie", indicaba Pastoriza. "El encuentro lo hacemos por solidardidad con la familia, pero también es importantes destacar muchos problemas de custodias de los padres. Son muchas las mujeres y los hombres que pasan miedo en estos casos y los niños no tienen que estar en el medio de disputas de pareja", señalaba una de las organizadoras.
A la llegada a las puertas del juzgado, la marcha guardó cinco minutos de silencio por las dos pequeñas asesinadas, que fue roto finalmente por un gran aplauso y la suelta de los globos azules. Los asistentes formaron un altar con las velas y con los pétalos de las flores que portaban en señal de duelo por Candela y Amaia.
Arzobispado
El arzobispado de Santiago convocó para mañana un encuentro de "oración, reparación e intercesión" en recuerdo de las dos pequeñas asesinadas presuntamente por su padre en Moraña, así como de apoyo a su familia. Según informó el arzobispado, la vigilia tendrá lugar en el monasterio de las Benedictinas, situado en Cuntis y siervirá como recuerdo a las víctimas de este "triste y luctuoso acontecimiento".
En concreto, a las 20 horas habrá un rezo de Vísperas, seguido de exposición del Santísimo y ortación, con predicación del vicario episcopal territorial de Pontevedra, Calixto Cobo Franco. A continuación, a las 21 horas tendrá lugar el rezo del Rosario.
