El Colegio de Abogados de Pontevedra es una de las instituciones que han recibido este año el galardón Amigos de Pontevedra. Su decano, Ramón Jáudenes, destaca la importancia que da a este premio la abogacía pontevedresa por tener su origen en el pueblo.
-¿Qué significa para el Colegio de Abogados recibir el premio Amigos de Pontevedra?
-Es una satisfacción muy grande. En primer lugar porque es un reconocimiento de tus propios convecinos a la labor que venimos realizando todos estos años. Es un premio de la sociedad civil, es decir, no viene dirigido desde ninguna administración sino que es la propia sociedad civil la que nos reconoce esta tarea y por eso estamos realmente tan ilusionados y tan contentos. La verdad es este reconocimiento nos anima a seguir bregando por todo aquello por lo que luchamos en el Colegio de Abogados, por ordenar primero nuestra profesión y por continuar con esta tarea de servicio público que tenemos encomendada como es el de Justicia Gratuita.
-¿Cree que ha sido esa vertiente del Colegio que se podría llamar más "social" la que ha permitido que les concedan este galardón?
-El Colegio tiene dos grandes tareas. La primera, la interna, referida al propio oficio de la abogacía y que gira en torno a cuestiones como el propio control deontológico, tutelamos el aseguramiento de la responsabilidad civil y otras muchas responsabilidades..., pero es cierto que tiene otra parte de función pública que efectivamente es el del servicio de turno de oficio y de asistencia jurídica al detenido en la cual el colegio de Pontevedra, que como sabe es provincial, hace un esfuerzo ímprobo dado que tramitamos unos 12.000 expedientes al año. Con ello damos cobertura a dos tercios de la población de la provincia y a casi un cuarto de la población gallega. En total 640.000 justiciables a los que asistimos. Supongo que sí, que la población reconoce esta labor y también por el reconocimiento de más tareas que hacemos por la sociedad sin pedir contraprestación. Sin ir más lejos, creamos en Pontevedra, O Porriño y en Lalín y en Ponteareas y allí donde los alcaldes quisieron, unas oficinas de asistencia a las víctimas de las hipotecas. El Colegio también atiende de forma gratuita el servicio de asistencia a los presos en A Lama, los compañeros de una forma noble y entregada van todas las semanas a prestar asesoramiento a los internos allí donde no llega el abogado de pago o el de oficio. Es decir, somos un colegio comprometido con la sociedad al cien por cien. No solo con el turno de oficio.
-El Colegio se ha significado siempre a la hora de sumarse a iniciativas para defender el estatus de la ciudad de Pontevedra y de su comarca.
-Efectivamente. Nosotros nos reunimos con todos los alcaldes que eran cabecera de los partidos judiciales de nuestra jurisdicción, entre ellos Pontevedra para pedir el mantenimiento de la actual planta judicial y que supone el mantenimiento de todos y cada uno de los juzgados de la provincia y por supuesto de los de Pontevedra. Como sabe esta es una pelea que viene de viejo. Los abogados fuimos un colectivo fundamental cuando la ciudadanía se echó a la calle en el célebre 5-J pidiendo el mantenimiento de la Audiencia Provincial y también se hicieron gestiones para el mantenimiento de los juzgados de lo Mercantil en la capital. Siempre el Colegio de Abogados se manifestó a favor del mantenimiento de aquellas infraestructuras y juzgados que por derecho propio nos corresponden.
-Además es una de las instituciones más emblemáticas y con más arraigo en la ciudad...
-Pues yo creo que es una de las instituciones más antiguas de Pontevedra. Nosotros cumplimos este año el 18 de agosto 177 años. Se fundó en 1838 de tal forma que somos una institución más que centenaria y que ha formado parte siempre de la vida de la sociedad pontevedresa.
-¿Mantendrá vigente el Colegio de Abogados ese compromiso que siempre mostró con Pontevedra?
-Es y será total al cien por cien. Yo soy el decano número 33 de la larga vida de esta institución y espero que otros 33 más sigan abogando por Pontevedra y llevándola por bandera allá donde vayan. En cualquier sitio al que voy en mis discursos abogo por esta ciudad con verdadero orgullo y satisfacción. Yo siempre digo que somos doble capital, de la provincia y de las Rías Baixas.
