La Academia Galega de Belas Artes propuso ayer, entre otras iniciativas, que la fábrica de la Cross se incluya en el catálogo de bienes culturales de Galicia. Esta institución pide a la Xunta que tramite la inclusión en dicho catálogo de un total de trece obras arquitectónicas del Movimiento Moderno, que va de 1925 a 1965. Actualmente, la fábrica de la Cross, construida en 1954, la utiliza Ceferino Nogueira como almacén de cereales y en su día su actividad estuvo centrada en fertilizantes y abonos químicos.

Además de esta nave que se encuentra ubicada en la calle la Gándara, en Campañó, la Academia incluye en esta selección barrios, conventos, colegios, fábricas, iglesias, lonjas, edificios residenciales y de universidades, así como un embalse.

El estudio hecho por la Fundación Docomomo Ibérico (Documentación y Conservación de la Arquitectura y el Urbanismo del Movimiento Moderno) destaca que la fábrica, construida por Ingeniería Proquiver, sufrió algunas alteraciones con respecto a la original que estuvieron justificadas por su puesta en marcha.

El conjunto inicial constaba de edificios de producción, naves de almacenamiento, edificios administrativos, viviendas de técnicos y dirección, depósito de agua e instalaciones deportivas. La pieza de mayor interés de este complejo, cuyas edificaciones se conservan en parte, es el gran espacio de almacenamiento, concebido como una gran estructura de hormigón que organiza de forma espacial todo el conjunto.

La nave central, de considerable altura, está constituida por un caparazón curva de arcos triarticulados y tensados; a ambos lados, una serie de bóvedas organizan unas naves laterales de inferior altura, lo que permite resolver la iluminación y facilitar el arriostramiento del conjunto.

El vicepresidente de la Academia de Belas Artes, el pontevedrés Celestino García Braña, explica que tanto la fábrica de la Cross como el resto de inmuebles seleccionados son edificios sobresalientes de Galicia en ese período porque "tienen un valor cultural de primera magnitud, igual que una iglesia románica o un pazo del siglo XIX. Para entendernos, estamos en la época del hormigón, el vidrio y el hierro, así como en la de la funcionalidad y la industria".

Doscientos edificios

Celestino Braña precisa que no son los únicos edificios modernos de Galicia, cuya nómina puede llegar a doscientos, "de los que setenta u ochenta son importantes".

La Fundación Docomomo seleccionó 256 obras en toda España, de las que las trece señaladas corresponden a Galicia, de ahí que la Academia de Belas Artes demande ahora su catalogación, toda vez que este organismo "está decidida a jugar un papel relevante en las artes y modernidad de Galicia", apunta el arquitecto pontevedrés García Braña.