El pleno de la Diputación aprobó, por unanimidad de los grupos, integrarse en la Fundación Lago de Castiñeiras-Cotorredondo impulsada por las comunidades de Montes de San Tomé de Piñeiro y San Xulián de Marín; Santa Cristina de Cobres y San Martiño de Vilaboa, así como ambos Concellos, con el fin de explotar turísticamente, a la vez que conservar, la riqueza medioambiental y paisajística de este enclave natural.

La moción se presentó por vía de urgencia a propuesta del grupo socialista "ante el final de esta legislatura" -explicó el portavoz socialista Santos Héctor- y en ella se propone la incorporación de la administración provincial a este proyecto de valorización de los montes de Marín y Vilaboa, presupuestado en 1,3 millones de euros.

Por parte del grupo popular, la diputada y alcaldesa de Marín, María Ramallo, planteó aceptar la primera parte de la moción, la referida a la adhesión de la Diputación a la fundación, pero solicitó la retirada del segundo punto, en el que se proponía una asignación presupuestaria de 450.000 euros para esta finalidad, "hasta que se integre la Xunta de Galicia, que es quien tiene competencia en la cesión de los terrenos" y se complete la tramitación administrativa de esta iniciativa público-privada. El grupo socialista aceptó la retirada del punto relativo a la asignación económica, con lo que la moción se aprobó por unanimidad.

Volver a asar en el parque

Ramallo recordó además que los impulsores del plan proponen otras cuestiones, como que se vuelva a permitir asar en el parque natural, algo que tendrá que ser valorado por las administraciones competentes, así como mejoras en los viales cuya titularidad "está en entredicho".

Este proyecto, sobre una superficie de 80 hectáreas que incluye el lago de Castiñeiras, contempla la creación de un jardín botánico y un arboreto.