Un nuevo caso de maltrato a caballos ha sido denunciado por la Asociación Animalista Libera y la Fondation Franz Weber. En esta ocasión ha aparecido el animal encadenado en sus patas delanteras en Monte Xesteiras, en Cuntis.
Los integrantes de este colectivo se han mostrado sorprendidos por la estampa del animal con un entresijo de cadenas atado a sus patas delanteras, y que le impedía desplazarse con normalidad.
Esta práctica, a pesar de ser constitutiva de un delito de maltrato animal, sigue estando presente en los montes gallegos y "Libera" culpa de ello "a la inacción de las autoridades y a la falta escandalosa de medios técnicos y humanos para identificar y detener a los responsables", como este último suceso que tiene lugar en Monte Xesteiras, entre los municipios de Valga y Cuntis. Después de tres años los colectivos animalistas han logrado documentar 126 casos de maltrato a caballos, de los que tan solo uno ha finalizado en condena.
La falta de sanciones está generando, a ojos de los defensores de los animales, una falsa sensación de impunidad, ya que los animales no acostumbran a estar debidamente identificados a pesar de que se trata de una exigencia de la Unión Europea, sobre la cual se reforzará el control a partir de 2016 con la revisión del reglamento comunitario que incrementará las medidas de identificación e inspección.
Fiscalía
En este sentido desde la Asociación Animalista Libera y la Fondation Franz Weber ya avanzan la interposición de un escrito de denuncia ante la Fiscalía de Medio Ambiente de la provincia de Pontevedra contra el autor de la colocación de estas cadenas, reclamando la imputación de un delito, que implica penas de hasta un año de prisión e inhabilitaciones especiales para el comercio o trabajo con animales por un máximo de 36 meses.
Las conocidas como "pexas" o "trancas" y el uso de cadenas y cuerdas causa, según los especialistas veterinarios, múltiples dolencias a los caballos, como heridas abiertas, lesiones en tendones por falta de atención urgente o incluso la mutilación de la pata "pexada" como han identificado los animalistas de forma reciente en otro punto de la provincia de Pontevedra, el monte de Domaio, en el cual las organizaciones han recibido decenas de denuncias ciudadanas por motivos similares.
Los animalistas presentaron recientemente una denuncia ante la Comisión de Peticiones del Parlamento Europeo, advirtiendo el incumplimiento sistemático de las disposiciones comunitarias sobre identificación de ganado equino, que incluye caballos y otros équidos
