La demanda de alcantarillado en la carretera N-541 moviliza desde hace semanas a numerosos vecinos de Mourente (además de los de Bora, parroquia también atravesada por ese vial) para exigir al Concello que instale el saneamiento en la zona aprovechando las futuras obras de urbanización de la carretera, por parte del Ministerio de Fomento. Pero a esta reclamación, los vecinos de Mourente han unido una segunda queja: el deficiente estado del vial de Os Campos, que enlaza el barrio de Monte Porreiro con la zona de Santa Margarita.

Residentes en la zona han denunciado la falta de aceras, la nula conservación del pavimento, con numerosos baches y grietas, y se quejan de la "velocidad" del tráfico por la zona, muy intenso dada su cercanía a Monte Porreiro. Recuerdan que hace unos años, en febrero de 2009, ya se produjo un atropello mortal y se han registrado otros incidentes, entre ellos la reciente colisión de un camión con un contenedor de basuras.

Curiosamente, estas quejas vecinales por el mal estado de esta carretera llegan poco antes de que el Concello informe de un proyecto de mejora de la accesibilidad y seguridad vial en ese lugar. El concejal de Mobilidade, Luis Bará, tiene previsto presentar hoy esa actuación.

Sin alcantarillado

Pero lo que no parece contar con un proyecto a corto plazo es el relativo al saneamiento de zonas como O Pazo, Eirós y Carabelos, a lo largo de la N-541 para dotar de este servicio a unas 140 viviendas. Tras meses de reclamaciones, los vecinos han decidido colgar pancartas en varios puntos para echar en cara del Concello, en especial del alcalde, Miguel Fernández Lores, esta situación. En las pancartas se cita expresamente al regidor, por "no tener un gesto serio que demuestre su firme intención de cumplir" con este proyecto.

El Concello habilitó hace unas semanas una pequeña partida de 50.000 euros para afrontar una obra que supera el millón de euros y pretende que la Xunta firme un tercer convenio de saneamiento del rural y aporte el 70% de la financiación para actuar en Mourente. La Xunta, a la que se dirigieron los vecinos, no llegó a contestar y Fomento, que urbanizará la carretera, afirma que el alcantarillado es una competencia municipal, por lo que los afectados dirigen directamente sus quejas al Concello. En esta demanda también participan los vecinos de O Teso, Leirados y A Corbal, en la vecina parroquia de Bora, donde también se reformará la N-541, pero sin la previsión de instalar el saneamiento.