Un joven de Pontevedra del que no se tenían noticias desde primera hora del jueves fue localizado ayer en Cabo Udra después de que su familia y sus amigos denunciasen su desaparición y se activase un protocolo de búsqueda por tierra, mar y aire. David López Cameselle, de 27 años de edad, fue encontrado por la Guardia Civil en uno de los antiguos chozos o cabañas de pastores de Udra, donde se había refugiado después de sufrir un percance cuando estaba realizando deporte en la zona. El joven se encontraba bien, aunque un tanto desorientado y tenía un esguince que le impedía caminar.

Las últimas noticias que se tenían de David López Cameselle son de la madrugada y de la mañana del jueves. Una amiga se despidió de él a las 2.00 horas del jueves y poco después de las 9.00 horas envió un mensaje de saludo a través de Whatsapp a sus compañeros de trabajo del Casino de Pontevedra. Sin embargo, ese mismo día ya no se presentó a trabajar y empezó a cundir la preocupación entre familia y amigos, que formalizaron la denuncia de desaparición en la mañana de ayer en la comisaría de la Policía Nacional. Al mismo tiempo activaron también una alerta a través del Facebook, aportando el modelo de su coche y matrícula.

El vehículo, clave

El vehículo, un Seat Ibiza, fue hallado a primera hora de la tarde en el entorno de la explanada de Chan de Esqueiros, en el entorno de Cabo Udra. Hasta allí se desplazó en primer lugar una patrulla de la Guardia Civil para rastrear la zona y contó con la ayuda del vigilante motorizado de la Cofradía de Bueu, que se encarga de disuadir a los furtivos. El guarda del pósito confirmó que el Seat Ibiza estaba estacionado en ese lugar al menos desde el jueves por la tarde y se sumó a la búsqueda.

Uno de los agentes de la Guardia Civil encontró a David López cobijado en una de las antiguas cabañas de piedra cercanas a Ancoradouro. El joven, que es monitor deportivo, suele acudir con frecuencia a Udra a realizar ejercicio y explicó que durante su recorrido del jueves sufrió un resbalón que le provocó un esguince. Para más inri no llevaba consigo el teléfono móvil, que se lo había dejado en casa. David López intentó entablillarse él mismo la zona afectada para poder caminar y pedir ayuda, pero sin éxito.

Al final tuvo que refugiarse en uno de los chozos de Udra y pasó allí prácticamente un día, a la espera de que alguien le pudiese ayudar. En este lugar le encontró uno de los agentes de la Guardia Civil a las 17.15 horas de ayer y a continuación fue trasladado hasta la explanada de Chan de Esqueiros. Hasta allí acudieron también Policía Nacional, Policía Local y la ambulancia del 061 con base en Bueu. En ese momento se desactivó el dispositivo de búsqueda, para el que se había movilizado a Salvamento Marítimo y al helicóptero de la Xunta. Hasta Chan de Esqueiros acudieron también amigos y allegados de David López Cameselle, que no ocultaban su alegría tras muchas horas de angustia y preocupación. Desde allí el joven fue llevado hasta el centro de salud de Bueu y luego al hospital de Montecelo.