Las cifras que arroja el estudio de viabilidad sobre el proyecto para construir las pozas de A Tafona fueron las principales armas que utilizó ayer el alcalde de Caldas de Reis, Juan Manuel Rey, para intentar que la oposición respalde en el pleno la construcción del complejo termal.
En una reunión entre los portavoces de los distintos grupos parlamentarios celebrada ayer, Rey trató de convencer con las cifras que arroja este estudio elaborado por una empresa externa al Concello, aunque encargado por la administración loca, y que señalan que la iniciativa es perfectamente viable. Los datos que trascendieron hasta ahora de este plan, y según desveló en su día el propio alcalde, indican que el complejo sería rentable desde el primer año, podría amortizarse en un periodo de tiempo relativamente corto y se prevé que pudiera atraer en el primer año a unos 28.000 usuarios, entre otros datos que ya salieron a la luz. Los detalles los dará a conocer hoy el regidor después de trasladarlos en la jornada de ayer a los grupos de la oposición.
Rey confía en poder hacer cambiar de postura al PP y al BNG para obtener el respaldo para este proyecto que no tuvo en agosto. El alcalde da por hecho que Independientes de Caldas de Reis no va a variar su oposición al complejo termal, pero confía en que los populares al menos examinen el estudio de viabilidad con detenimiento y se posicionen de forma favorable. También espera convencer al BNG, cuyo portavoz ya tiene en su poder el estudio de viabilidad para su estudio desde hace días. Ayer no pudo asistir a la reunión de portavoces.
El alcalde espera contar con el apoyo del resto de partidos para lo que define como uno de los proyectos claves de este mandato, sin embargo, advirtió que las pozas de A Tafona se van a construir sí o sí "como elemento de dinamismo económico y social", para potenciar el turismo en Caldas cuyos dos referentes son el termalismo y el Camino de Santiago.
