El BNG de Caldas alertó ayer de que en el lugar de Casalderrique (Carracedo) "los vecinos no pueden consumir agua de las traídas comunales, ya que está contaminada y no sirve para beber". Los nacionalistas, que citan quejas de los propios afectados, entienden "que esta situación debe ser corregida de inmediato, motivo por el cual presentaremos una moción en el pleno instando al Concello de Caldas de Reis a resolver este problema en el menor tiempo posible, haciendo las gestiones ante Unión Fenosa para que lleve electricidad hasta las dos traídas afectadas y financiando la compra de una depuradora para que los vecinos de Casalderrique puedan volver a beber el agua del grifo". El BNG señala, en todo caso, que "ante la gravedad del problema" tendría que resolverse antes de que se celebre el pleno.

El BNG explica que "las alarmas saltaron hace un año, cuando en un análisis para conocer la calidad del agua se detectó la presencia de fecales, momento desde el cual los vecinos tienen que comprar agua embotellada para poder beber, ya que la de la traída no es apta para el consumo. Esta situación es idéntica en las dos traídas que hay en el lugar, por lo que afecta a unas 40 viviendas".

Los nacionalistas aprovechan para criticar las actuaciones en el rural del gobierno local, hasta el punto de que asegura que "el rural caldense está hoy peor que hace tres años, pues apenas se hizo nada nuevo y lo que ya había no se le hizo un idóneo mantenimiento".