Nueve horas después de iniciada la última reunión negociadora sobre el ERE extintivo que tienen sobre la mesa, los trabajadores de la fábrica de Tafisa hicieron un alto para sumarse a la manifestación unitaria "Por el empleo" que recorrió ayer las calles de la ciudad. A las diez de la noche regresaron a la reunión con la perspectiva de unas largas y tensas horas por delante ya que la mediadora en el conflicto, la inspectora de Trabajo, Verónica Fernández, no estaba dispuesta arrojar la toalla y dar por concluida la sesión y con ella el plazo oficial de negociación.

Si en el tiempo de descuento no se llega a un acuerdo entre las partes, la dirección de Tafisa ya ha comunicado que seguirá adelante y presentará el ERE ante la autoridad laboral y el comité, por su parte, anunció que responderán con una demanda en el Juzgado de lo Social con la que pedirán la nulidad de los despidos ya que están inmersos en una regulación de empleo temporal con vigencia hasta septiembre. En el aire está el trabajo de 60 personas, la plantilla de la fábrica que tiene Tafisa en A Reigosa (Ponte Caldelas).

"Hubo algunos movimientos pero las posturas están muy alejadas" reconocía ayer el presidente del comité y delegado de UGT, José Manuel Moledo, poco antes de regresar a la sesión nocturna de la mesa de negociación. "Lo que avanzamos es que estamos negociando con la base económica del acuerdo de Solsona (fábrica del grupo cerrada en 2012) para los despidos, 35 días por año trabajado y un máximo de 21 mensualidades, un punto de partida que tardamos horas en conseguir, pero las cantidades que nos ofrecen no son suficientes y además no entran a fondo en las prejubilaciones o en el tema de los traslados".

Los trabajadores, que defendieron hasta el último momento y aún defienden, la viabilidad de la fábrica de Ponte Caldelas, reclaman indemnizaciones "más generosas" de las que se están planteando pues recuerdan que ellos han apostado por Tafisa y por esta apuesta han "sacrificado" once meses de paro, consumidos en ERE pactados con la empresa.

Reducir despidos

El comité propuso a Tafisa-Tableros de Fibras SA reducir el número de despidos con once prejubilaciones y con un número lo más alto posible de recolocaciones en otros centros de trabajo de la compañía para las que piden garantías económicas y de continuidad laboral. De hecho, añade, José Manuel Moledo, "pusimos sobre la mesa 26 solicitudes de traslado para la fábrica de Betanzos o para cualquier otra de la península".

La retomada reunión es la segunda que se celebra con mediación, una labor que la plantilla reconocen, ya que "con ella (la inspectora Verónica Fernández) la empresa se movió algo" indicaba el presidente del comité que, sin embargo, criticaba el "escaso margen" de maniobra de los representantes de la compañía: "tienen que consultar cada paso y tardan una hora y media o dos en dar una respuesta". "Llevamos nueve horas de negociación y juntos, empresa y nosotros, estuvimos tres horas, lo demás fueron reuniones por separado con la mediadora y recesos pedidos por la empresa para consultar," señalaba Moledo.