Al menos 3.600 abonados, que son el 10% de todos los usuarios del servicio municipal de agua, han resultado afectados por el error en los recibos de pago según los cálculos realizados ayer por la empresa concesionaria, Viaqua, después de que cientos de clientes se vean obligados a hacer cola ante sus oficinas para resolver las cartas de impago y las notificaciones de sus códigos bancarios, que aparecen confundidos en la factura, de ahí que en su mayor parte sean devueltos por el banco.

Tanto Viaqua (antigua Aquagest) como el Concello, explicaron ayer que la anomalía obedece a "problemas con los códigos de identificación (IBAN) de algunas entidades bancarias", lo que llevó a la empresa a "informar por carta a unos 3.600 usuarios de que no pudo emitir o fue devuelto el último recibo bimestral". El Concello, por su parte, indica que las entidades afectadas con el Banco Popular, el Pastor y Banesto, "los tres incluidos en procesos de fusión o absorción, "que les llevó a a cambiar el IBAN". Agrega que "esta situación provocó que a la hora de emitir los recibos no se identificase a la entidad bancaria en cuestión, a lo que hubo que añadir la obligación de los usuarios de dar cuenta de sus nuevos códigos para la gestión de sus cuentas".

Pese a que este problema provocó notables trastornos a los abonados, el Concello habla de "disfuncionalidad puntual en algún banco" y que "una gran cantidad de afectados ya regularizó su situación", si bien se aconseja a los demás que acudan a su banco o a las oficinas de Viaqua en la calle Padre Luis. La empresa concesionaria ya incluyó en el último recibo un aviso en el que se rogaba a los clientes que "comprueben que sus números de cuenta actual coincide" con los que obran en su poder ya que en caso contrario "pueden producirse devoluciones bancarias indeseadas como consecuencia de la eliminación de los redireccionados que las entidades bancarias realizan de cuentas no actualizadas por fusiones, cambios de agencia y otras razones".