El juicio rápido que se iba a celebrar ayer en los Xulgados de Cangas contra un joven de 18 años que dejó conducir su coche a otro joven menor de edad quedó aplazado. Una de las partes solicitó la instrucción de diligencias previas, por lo que el juicio tuvo que ser aplazado a la espera de que se practiquen las pruebas solicitadas.

La vista estaba prevista en el Xulgado de Instrucción número 3 y el acusado es un joven de 18 años de Vilaboa, al que se le imputa un presunto delito contra la seguridad vial por entregar su coche a una persona que carecía de los conocimientos y del permiso para conducir puesto que sólo tiene 15 años de edad. Los dos fueron detenidos de madrugada en la N-554 entre Vilaboa y Rande después de que se saltasen un control de alcoholemia y emprendiesen una fuga a gran velocidad. El dueño del vehículo apenas había obtenido el carné hace dos meses y dice que se lo dejó a su compañero para "aprender a conducir".

El joven de 15 años al llegar a un control de alcoholemia de la Guardia Civil, en lugar de detenerse decidió continuar a gran velocidad y con las luces apagadas para intentar despistar a los agentes que finalmente lo interceptaron.

Este menor deberá comparecer ante la Fiscalía de Menores de Pontevedra cuando sea citado para ello. Ayer todavía no había declarado. En este tipo de casos el menor suele someterse a un curso o algún proyecto educativo de reinserción de menores relacionado con la seguridad vial.