Evitar el cese actividad de la planta de tableros de A Reigosa (Ponte Caldelas) o en su defecto "atenuar el impacto" del cierre sobre los trabajadores afectados. Son los objetivos principal y subsidiario que se ha marcado el conselleiro de Economía e Industria, Francisco Conde y que transmitió a los delegados del comité de Tafisa con los que se reunió en la tarde de ayer en Santiago.

Según explicó el presidente del comité, José Manuel Moledo, ellos expusieron al conselleiro las razones que les llevan a sostener que Tafisa-Ponte Caldelas es "viable" y le pidieron ayuda para tratar de revertir el cierre de la fábrica decidido por la compañía.

"El conselleiro comparte nuestra idea y nos dijo que ya había mantenido dos reuniones con directivos de Tafisa y que en los próximos días se entrevistará con altos ejecutivos de Sonae para intentar buscar una salida que no sea el cierre aunque también nos dijo, y nosotros ya lo sabemos, que es muy difícil que una multinacional cambie una decisión que dicen que es firme" indicó Moledo.

En cualquier caso Francisco Conde subrayó "la voluntad de seguir trabajando para identificar posibles soluciones que den salida al personal una vez que cese la actividad" , aseguran fuentes de la Consellería de Industria. "Nos dijo que estaban viendo la posibilidad de que entren nuevos socios en la empresa o de un comprador interesado en mantener la actividad industrial".

Por otra parte hoy se retoma la negociación del ERE extintivo que promueve la empresa para toda la plantilla y como ya es habitual los trabajadores se movilizarán ante la sede de la reunión.

Las posturas están muy alejadas, tal como reconoce el presidente del comité que pidió expresamente al conselleiro que nombren un mediador de la Xunta para, en el caso de que Tafisa finalmente cierre, intentar incrementar las posibilidades de recolocación de los trabajadores y mejorar las condiciones económicas de los que se vean abocados al paro o a prejubilaciones.