Deficiencia en la señalización horizontal y vertical, espacios reducidos, accesibilidad y seguridad limitada y déficit de plazas en determinadas zonas de la ciudad. Son las carencias detectadas por técnicos municipales y miembros de la asociación Amizade que elaboraron un informe sobre la oferta de aparcamientos para vehículos de personas con discapacidad.

Este diagnóstico, explicaba ayer el concelleiro de Mobilidade y portavoz de la comisión de Infraestructuras. Luis Bará, lleva al Concello a diseñar y poner en marcha un plan de actuación para señalizar correcta y uniformemente las plazas reservadas para vehículos de discapacitadas; agrandar los espacios y nivelarlos con la acera en donde sea necesario para garantizar la accesibilidad y la seguridad de los conductores y acompañantes.

Además de los trabajos destinados a dar visibilidad y mejorar la seguridad vial, se habilitarán nuevas plazas en calles céntricas como Augusto García Sánchez, Eduardo Pondal, Sagasta o Benito Corbal. Son áreas, explicaban fuentes municipales, en las que no hay, o son manifiestamente insuficientes, aparcamientos reservados.

Oferta municipal

En total está previsto actuar sobre 90 estacionamientos privativos de los algo más de 140 que existen en el territorio municipal.

De acuerdo con la información facilitada ayer por el concelleiro portavoz de la comisión de Infraestructuras, Luis Bará, los trabajos que comenzarán esta misma semana ya están contratados y han sido presupuestados en algo más de 60.000 euros.

La mejora y extensión de los aparcamientos reservados a vehículos de personas discapacitadas irá parejo a una intensificación del control de su uso por parte de la Policía Local. Un control que, por otra parte, ya se viene haciendo sobre todo en aquellos puntos en los que hay quejas de potenciales usuarios porque están ocupadas las plazas reservadas de manera sistemática por coches no acreditados para hacerlo o por vehículos de transporte que las utilizan como espacio de carga y descarga.