El gobierno local ha decidido prorrogar tres años más el contrato de Cespa para que la empresa siga ocupándose del servicio de limpieza y recogida de basuras de Pontevedra. Hasta el 2017 habría tiempo suficiente para diseñar, construir y poner en funcionamiento la futura planta de compostaje que impulsan Concello y Diputación de manera conjunta, sostiene la concelleira de Servizos, Carme da Silva, un proyecto que obligará a redactar otro contrato puesto que conllevará cambios fundamentales en la reordenación del trabajo y las prestaciones que tendrá que asumir la empresa concesionaria del servicio. Por consiguiente será necesaria una nueva adjudicación.

Tal como enumeraba ayer la concelleira de Servizos el futuro contrato, entre otras cosas, deberá incluir un nuevo sistema de contenedores, cambios en los puntos de recogida, una apuesta decidida por la educación ambiental y la incorporación de nuevas obligaciones contractuales por parte de la empresa adjudicataria.

Es este proyecto de planta de compostaje el "elemento determinante" que ha llevado al gobierno local a decantarse por una prórroga de tres años remarcaba ayer Carme da Silva, a pesar de que el actual contrato de Cespa contempla la posibilidad de establecer prórrogas de seis años por un periodo máximo de 50 años.

Además de este "elemento determinante", existe otro condicionante económico que también es fundamental: la prórroga de Cespa supone respecto a una nueva adjudicación y con las mismas prestaciones un ahorro de un mínimo de dos millones de euros solo en la recogida de basuras. Un incremento que Da Silva liga a factores como el aumento del precio del gasoil y del transporte o el crecimiento de la ciudad.

La prórroga de Cespa supondrá para las arcas municipales un desembolso anual cercano a los seis millones de euros.

La concesionaria del servicio municipal de basuras desde 1999 -el exalcalde Juan Luis Pedrosa firmó la adjudicación días antes de dejar la alcaldía tras perder las elecciones por doce años y el contrato se había prorrogado en 2011 por tres años- recoge una media anual de 30.000 kilos de residuos sólidos urbanos.

El prorrogado contrato con Cespa incluye obligaciones como la recogida de basuras, recogida selectiva, limpieza viaria o limpieza de algunos edificios municipales, así como los operativos especiales que se ponen en marcha con motivos de eventos puntuales como eventos deportivos, conciertos o citas festivas.