Retenciones de tráfico en los accesos a la ciudad por la zona Norte desde primera hora de la mañana, aunque menos de los esperados, algún problema circulatorio durante la jornada y cientos de llamadas telefónicas de vecinos y conductores a la centralita de la jefatura de la Policía Local, dieron la bienvenida al Campeonato del Mundo de Duatlón, que hoy concluye en Pontevedra. Las molestias para la circulación rodada se vieron compensadas por el ambiente de fiesta deportiva que se vive en la ciudad desde la noche del pasado viernes y que previsiblemente se incrementará hoy con las pruebas dirigidas a aficionados, que arrastrarán a la ciudad a numerosos atletas no profesionales que quieren disfrutar de la infraestructura de un mundial.

Unos 1.500 atletas procedentes de una treintena de países, además de otros 3.500 acompañantes de los deportistas (organización y familiares), se han hecho ver durante las primeras jornadas de la prueba por las calles de Pontevedra, principalmente en las terrazas de bares y cafeterías del centro histórico. El "lleno" en las calles, hoteles y otros establecimientos fue una constante durante todo el fin de semana. Además, resulta fácilmente reconocibles a los participantes, que en buena medida viajaron acompañados de sus familias. Ataviados con los colores de sus banderas, o con prendas adornadas con el nombre de su país, decenas de extranjeros (desde Australia a Estados Unidos) ocuparon las calles y disfrutaron de la gastronomía local. Muchos de ellos descubrieron el casco viejo y no fueron pocos los que se llevaron un recuerdo en fotografías, incluso de las casas abandonadas y en ruinas.

Las aproximadamente 5.000 personas que moviliza esta prueba han logrado una ocupación hotelera del cien por cien, tanto en los establecimientos de la ciudad como en los de las ciudades próximas y se estima que este campeonato dejará en la capital unos dos millones de euros de retorno económico, según las previsiones oficiales.

Al margen de las cifras, los vecinos de Pontevedra comprobaron ya el impacto que una convocatoria de estas características supone para sus calles, tanto en lo que se refiere a las molestias como por la animación que genera la presencia de miles de visitantes extranjeros que llenan taperías, bares y restaurantes. Pontevedreses y visitantes fueron testigos ayer del ambiente y los inconvenientes creados por las pruebas del mundial. Más de 600 vallas delimitaron el circuito urbano instalado en el centro histórico y zona del río, ámbitos en los que está prohibido estacionar desde el pasado jueves.

Quienes desconociendo la celebración de esta prueba quisieron entrar en Pontevedra como un sábado más para realizar sus compras, se toparon con el cierre de los principales accesos desde la zona norte de la ciudad, por la N-550 entre Pontevedra y Barro, así como en la carretera de Vilagarcía-Curro, donde hoy también se restringirá el tráfico entre las siete y media de la mañana y las cuatro de la tarde.

Los aparcamientos disuasorios del entorno del mercado y el pabellón de deportes también fueron anulados, algo que cogió de sorpresa a numerosos conductores que quisieron entrar en la ciudad a primeras horas de la mañana y de la tarde.

Las pruebas se desarrollan entre las ocho de la mañana y las ocho y media de la tarde. El circuito a pie que recorren los atletas discurre por Padre Fernando Olmedo (hasta el número 22), Padre Gaite, Perfecto Feijóo, Plaza de Barcelos, Rouco, Cobián Roffignac, Benito Corbal, Plaza Peregrina, Puerta de Trabancas, Soportales de A Ferrería, Plaza Curros Enríquez, Real, Sarmiento, Padre Amoedo, Buenos Aires, y José Malvar (hasta el cruce de A Seca); mientras que el circuito de bicicleta pasa por Avenida de Buenos Aires, Puente de los Tirantes, Rafael Areses, Avenida Compostela (hasta la rotonda Médico Ballina) Puente de Santiago y Avenida de Buenos Aires.

La competición se desarrollará hoy hasta las 18.30 horas, pero posteriormente está prevista la entrega de premios en las instalaciones del recinto ferial, donde a partir de las 22.00 horas se celebrará una ceremonia de clausura con el concierto de la Orquesta Panorama para todos los deportistas y equipos.

Al término de las pruebas de la tarde comenzará la retirada de toda la infraestructura colocada para las carreras, tras lo que se irá restaurando tanto la circulación rodada como el estacionamiento en las calles afectadas y el acceso a garajes particulares.

La página web del Concello ofrece en estos días información sobre los cortes de tráfico y las zonas afectadas y la Policía Local pone a disposición de los vecinos el teléfono 986 833 080, o bien el correo electrónico cetra@pontevedra.eu, para ofrecer información ante cualquier consulta por parte de vecinos o visitantes que estos días acuden a la ciudad.