La vigésima edición de la Festa da Raia que se celebró hasta el pasado domingo en Portonovo sirvió más de 2.770 degustaciones, lo que supone un aumento con respecto al año pasado, hasta el punto de que se agotaron las existencias.

Las doce entidades que participaron en la organización (Cofradía de Pescadores, Entretendas, Asociación Avante, Asociación de Vecinos San Cristóbal, Coral Polifónica Santa María de Adina, Club de Xubilados de Portonovo, Asociación Folclórica Os Gatiños, Mulleres Rurais Santa Catalina, Asociación Porenarte, Asociación Retesías, Asociación Cultural Teatro do Mar y Concello de Sanxenxo), hicieron ayer balance de la fiesta.

Cuatro mil personas

Según sus cálculos, la participación en las diferentes actividades programadas (corales, orquesta, acto de homenaje a Fran Rico, festival y talleres, entre otros) superó las 4.000 personas, sin contar a las que acudieron a la carpa solo a degustar los platos. Las raciones fueron servidas por los restaurantes Mesón O Chasco, Bar A Curva y Piscaretes "Cociña con xeito". La caldeirada de raya fue un año más el plato estrella, como era previsible, pero muy cerca se situó la empanada. Los organizadores apuntan que el salpicón fue también un plato muy consumido, si bien se observa que las nuevas modalidades "también se hicieron un hueco" entre los asistentes. Además, se constató una mayor afluencia y más ventas en la jornada del sábado.

La organización apunta que "seguiremos apostando por el rumbo marcado", si bien se abre la puerta a "plantear novedades y sugerencias recogidas entre los propios asistentes y miembros de la organización".