Durante el pasado año, los agentes de la Policía Local inspeccionaron 251 vehículos (camiones y autobuses especialmente), 48 de ellos relacionados con el transporte escolar, y detectó un total de 101 infracciones, sobre todo en materia de documentación incompleta o inexistente, como carecer de tarjeta de transporte o de hojas de registro o documentos de control. Pero también hubo casos de exceso de peso, no tener la mercancía a temperatura regulada o incluso no disponer el vehículo de las condiciones técnicas necesarias para llevar productos perecederos.

En los 48 autobuses escolares controlados se detectaron 21 irregularidades: carecer de autorización para el transporte escolar (6), no disponer de dispositivos luminosos de señal de emergencia (5), carecer de martillos rompecristales (2), no tener la ITV pasada (2), ausencia de colores vivos en los bordes de los escalones (1), extintor caducado (1), no presentar el contrato de colaboración entre transportistas (2) o no llevar señal de transporte escolar (2).