La Asociación de Autopatronos del Taxi Rías Baixas afirma que las declaraciones realizadas por la alcaldesa de Marín, María Ramallo, respecto a sus demandas, "contradicen completamente el compromiso del concejal delegado", que prometió impulsar un nuevo reglamento, "y reducen nuestros problemas a una actualización de las tarifas", algo que "no da solución a los gravísimos problemas" que denuncia el colectivo. La directiva de esta asociación indica que la solución pasa por buscar el correcto funcionamiento del servicio, garantizando las guardias nocturnas, la salida por orden, el cobro de acuerdo con las tarifas obligatorias aprobadas por la Xunta y por el Concello, y sancionando a los incumplidores.

Solución

"Todo esto puede solucionarse con la legislación vigente, si el Ayuntamiento tiene verdadero interés en hacerlo", expone la agrupación, para quien, por el contrario, el Concello de Marín "no da solución a todas estas irregularidades, sino que trata de minimizarlas y desviar la atención hacia una simple actualización de las tarifas y la instalación de un taxímetro".

"Rías Baixas" explica que estas medidas por sí solas no solucionan los problemas "si desde el Concello no se ataja la competencia desleal y sigue permitiendo estas prácticas".

Descargas de pescado

"Resulta curioso que los ciudadanos de Marín vean taxis cargando en las escaleras de la Alameda, o entre el parque y la Alameda, taxis con remolques descargando pescado en la plaza, que no haya servicio de noche, o que no haya dos chóferes que cobren igual", indica la asociación. "Todo el mundo lo ve menos los responsables municipales", añade.

"Rías Baixas" aclara además que "somos la única asociación de taxis legalmente constituida y registrada ante el Concello de Marín, independientemente del número de socios, y tenemos el mismo derecho a que se escuche nuestras reivindicaciones, que sin duda van en beneficio del colectivo de taxistas del municipio, y al fin y al cabo de los usuarios del servicio".

Amenazas

Denuncia además que algunos miembros de esta asociación "llevan meses siendo amenazados a través de teléfonos con número oculto".

El colectivo explica que está trabajando "en solucionar la competencia desleal que practican una mayoría de compañeros", que básicamente consiste en el incumplimiento de la salida por orden, el cobro de tarifas inferiores a las autorizadas por la Xunta de Galicia y el Concello "con el fin de captar usuarios del Taxi y derivarlos a su teléfono privado", la promoción individual de números privados para la prestación del servicio (mediante tarjetas, anuncios en la prensa escrita, internet, etc.), taxistas que están haciendo paradas en lugares no habilitadas para ello, además del transporte de mercancías perecederas en remolque, o el incumplimiento de guardias nocturnas, todas ellas actuaciones que vulneran el reglamento municipal, explica "Rías Baixas".